Los Filis afrontan los últimos juegos de la temporada regular con la ilusión de volver a repetir su participación en la postemporada, un año más. Una segunda participación consecutiva en la postemporada, que no se vivía en la ciudad del Amor Fraternal desde que a mediados de la primera década de este siglo, el equipo encadenase cinco temporada al hilo, jugando en el mes de octubre.

Unos años mágicos (desde 2007 hasta 2011), en donde no se lograron alcanzar los playoffs, sino se lo lograron los hitos del Campeonato Mundial de 2008, el Campeonato de la Liga Nacional de 2009 (además del de 2008), y se disputaron tres series de Campeonato de la Liga Nacional de manera consecutiva (de 2008 a 2010, viajando dos veces a las Series Mundiales).

Unos años, en donde se lograron estos importantes hitos, no quedan demasiado lejos en el tiempo, y se quieren repetir ahora en el presente, con un equipo de garantías, que ya el año pasado viajó a la postemporada, vía comodín y que terminó siendo la revelación del torneo, llegando a las Series Mundiales y acariciando el anillo de campeón, que terminó conquistando finalmente el equipo de los Astros de Houston.

Ahora los Filis vuelven a tener en la mano estar en los playoffs, vía comodín, afrontando los últimos juegos de la temporada regular, con una cierta ventaja sobre sus rivales y con muchas opciones de no apurar tanto como el año pasado, para alcanzar el objetivo final.

De momento, y con algo más de dos semanas de competición por delante, los Filis cuentan con 79 victorias y cuatro triunfos de ventaja sobre los equipos que luchan por entrar en los puestos de comodín.

Ahora mismo el tercer puesto de comodín de la Liga Nacional, lo obstenta el equipo de los Gigantes de San Francisco, mientras que Arizona y Cincinnati le amenazan con el mismo promedio de los Gigantes (todos ellos con .514).

Con este panorama, los Filis están muy ilusionados con la posibilidad de alcanzar de nuevo la postemporada, sobre todo por el hecho de tener que enfrentarse a equipos que no se juegan nada en la recta final de la temporada.

El único rival que sí está en puestos de playoffs, y que se verán las caras con los Filis serán los Bravos de Atlanta. Un equipo que desde hace bastante tiempo está pensando en los playoffs y superará con creces los cien triunfos en 2023.

Pero del resto de rivales, en todas las series, el favorito será Filadelfia. Un arma de doble filo, ya que por un lado deja muy en la mano el poder incluso alcanzar las 90 victorias en la temporada, pero por otro lado la presión recae sobre los hombros de chicos de Rob Thomson.

Dieciséis juegos separan a los Filis de la postemporada, que con el actual promedio que atesoramos, nos proyectan por encima de las 88 victorias. Y San Luis será esa primera piedra de toque para afianzar posiciones y placar los nervios. Una gran oportunidad para no solo aumentar los cuatro juegos de ventaja y aproximarnos a las 90 victorias, sino que empezamos a ponernos modo postemporada 2022 (que ya sabemos a lo que nos condujo).

Y que mejor escenario que el terreno de los Cardenales, donde se venció en la pasada temporada, la primera serie de playoffs de 2022, la primera serie en más de una década para la organización.

Unos juegos muy importantes, sobre todo teniendo en cuenta que la siguiente visita será a Georgia, para vernos las caras con los Bravos de Atlanta. Una serie compleja, que sin la suficiente ventaja, bien podría ponernos en serios problema, con una semana de juegos por delante.

Los Mets, por partida doble y los Piratas serán los últimos rivales de los Filis, en la presente temporada regular. Unos rivales que a priori deberían de ser la sentencia para asegurar la presencia de Filadelfia en la fiesta de Octubre.

¿Volveremos a disfrutar de los Filis en la postemporada? ¿Se superarán los 87 triunfos del 2022? ¿Alcanzará el equipo las 90 victorias en 2023? Unas incógnitas que se resolverán en muy poco tiempo.

Hasta pronto desde España.