White Sox pretenden dar un salto con juventud en el 2018

9 de marzo de 2018
Carlos Osorio/AP

En el segundo año de la reconstrucción y tras una quinta temporada perdedora seguida, lo sensato para los White Sox de Chicago es moderar sus expectativas.
Los Medias Blancas divisan la próxima temporada con una prometedora colección de prospectos y el convencimiento de que se acercan tiempos mejores.
"Yo estoy entusiasmado, todos están entusiasmados", afirmó el manager Rick Rentería. "Lo único que debemos tener es paciencia y asegurarnos de hacer las cosas de la manera correcta de modo que cuando a ellos (los prospectos) les toque subir, puedan darte lo mejor que tienen".
Paciencia. Esa es la palabra que debe marcar el norte en Chicago, cuarto en la División Central de la Liga Americana en 2017 con una marca de 67-95 -- la cuarta peor en las mayores.
EL TIMONEL
De origen mexicano, Rentería es el individuo con las cualidades necesarias para navegar hacia el destino que buscan.
Con 55 años, se ha ganado una reputación de afable orientador que sabe congeniar con los jugadores.
"Creo que tenemos la suerte de contar con un manager que habla inglés y español. Es directo con su mensaje", dijo Reynaldo López, el lanzador dominicano que es una de sus más sobresalientes fichas jóvenes. "Siempre está tratando de motivarte, darte consejos para mejorar, que te sientas a gusto".
Rentería llegó al sur de Chicago en 2016 como el coach de banca de Robin Ventura tras ser despedido por los vecinos Cachorros tras apenas un año al frente. Los rivales de ciudad no quisieron dejar pasar la oportunidad de contratar a Joe Maddon.
La situación de Rentería con los Cachorros se asemejaba a la que tiene con los Medias Blancas ahora mismo: otro equipo juvenil inmerso en un aprendizaje.
Los Cachorros ganaron 73 partidos con Rentería. Desde entonces, han avanzado a la serie de campeonato de la Liga Nacional en tres años sucesivos y conquistaron la Serie Mundial de 2016.
LOS PRÓXIMOS BAUTISMOS
Rentería vuelve a encontrarse con la misión de pulir a un talentoso grupo de prospectos, ensamblado tras canjear desde fines de 2016 a figuras como Chris Sale, José Quintana, y , entre otros.
Algunos ya han absorbido algo de experiencia en las mayores como el caso del infielder cubano y los lanzadores López y .
Moncada bateó para .276 con cinco jonrones en sus últimos 24 juegos pero lo encomiable fue que exhibió más paciencia en el plato para trabajar cuentas, inclusive para dejar pasar malos lanzamientos con dos strikes.
Luego de ser subidos de Triple-A para el tramo final, Giolito tuvo efectividad de 2.38 con marca de 3-3 en siete aperturas y López tuvo una igual foja con efectividad de 4.72 en ocho aperturas. Ambos arrancan el año en una rotación que incluye a los veteranos y Miguel González, además de y Carlos Rodón (en recuperación tras una cirugía en el hombro izquierdo en septiembre).
El jardinero dominicano Eloy Jiménez y el lanzador iniciarán la campaña en las menores, pero no se descarta que sus debuts se concreten este año. También está , el jardinero cubano que adquirieron en el mercado internacional con un bono de 26 millones de dólares.
¿SE QUEDAN ABREU Y GARCÍA?
El primera base José Abreu y el jardinero derecho Avisail García son las dos piezas veteranas que sobrevivieron a la purga del gerente general Rick Hahn.
Interés por los dos no va a faltar, pero a Chicago le conviene retenerlos por la necesidad de tener mentores para la joven camada.
También hay que tratar de presentar un equipo lo más respetable posible. Y ambos están bajo control hasta 2019.
El cubano Abreu viene de una campaña en la que bateó 33 jonrones y 43 dobles. Más formidable fue la campaña de García, quien finalmente cuajó el rendimiento que se esperaba del venezolano desde que llegó en 2013 en un canje con Detroit. García acudió a su primer Juego de Estrellas y con un promedio de .330 quedó segundo en la liza de bateo de la Liga Americana, detrás de su compatriota José Altuve.
En el frente de adquisiciones, las transacciones fueron modestas, sobresaliendo el fichaje del receptor dominicano (15 millones por dos años). Los 20 jonrones y el promedio al bate de .282 con Baltimore el año pasado fueron los mejores números de Castillo en su carrera.
Además, vía un canje de tres bandas, adquirieron al relevista (salario de 9 millones). Con 203 salvados de por vida, el derecho mexicano sería el cerrador.
Por lo demás, todo es un incógnito sobre el potencial de un equipo pendiente a los avances de sus prospectos.
Como lo reiteró el gerente general Rick Hahn, hay que dejar trabajar a Rentería, fomentando la mentalidad de un equipo aguerrido que "da pelea cada juego, peleando los 27 años, noche tras noche".
"Esa es la mentalidad que queremos en esta fase inicial de la reconstrucción, pero que debe seguir cuando estemos en la posición de ganar campeonatos", añadió Hahn.