BALTIMORE – El dominicano Vladimir Guerrero Jr. continúa dejando claro que su búsqueda de la Triple Corona de bateo va en serio y el domingo el cañonero de los Azulejos igualó el liderato de jonrones de las Grandes Ligas al conectar ante los Orioles su 44to bambinazo de la campaña durante la victoria de Toronto por 22-7.

Igualado ahora con Shohei Ohtani de los Angelinos, le ha inyectado nueva vida a su temporada con dos increíbles semanas en el madero, incluyendo ocho jonrones en sus últimos 14 juegos. El toletero de 22 años sufrió un bajón ofensivo en agosto, llevando a algunos a preguntarse si se había quedado sin gasolina para la recta final de la temporada, pero Guerrero está de vuelta liderando a una de las más peligrosas ofensivas de las Mayores.

“Él sigue aprendiendo”, dijo el manager de Toronto, el puertorriqueño Charlie Montoyo. “Este es el primer año completo para muchos de esos muchachos, así que necesitan hacer un ajuste cuando están cansados y él ha hecho un buen trabajo en ese sentido. Su plan en el home está de regreso. Es increíble ahora mismo. Cuando ese plan suyo es realmente bueno, siempre va a tener la oportunidad de dar un jonrón”.

El cañonazo del domingo en Camden Yards fue un clásico de Guerrero, saliendo disparado del bate a 113.2 mph y pasando cerca del poste de foul del jardín izquierdo antes de impactar contra las gradas. Guerrero ha dejado jonrones hacia cada rincón del terreno esta campaña, pero cuando jala la bola hacia su banda con fuerza, nunca quedan dudas sobre el destino de la pelota.

Guerrero Jr., líder en promedio de bateo de la Liga Americana con .319, marcha de la siguiente manera en los tres departamentos de la Triple Corona:

Jonrones:
1. Vladimir Guerrero Jr. -- 44
2. Shohei Ohtani -- 44
3. Salvador Pérez -- 42

Promedio de bateo:
1. Vladimir Guerrero Jr. -- .319
2. Yuli Gurriel -- .315
3. Michael Brantley -- .315

Carreras empujadas:
1. José Abreu -- 107
2. Salvador Pérez -- 105
E-3. Vladimir Guerrero Jr. -- 102
E-3. Rafael Devers -- 102
E-3. Teoscar Hernández -- 102

Todo esto que está pasando tiene como piedra fundacional el estelar plan de ataque de Guerrero cuando entra a la caja de bateo. Guerrero siempre ha mantenido que él es, antes que nada, un bateador de promedio, y que el poder viene después, lo que demostró el sábado durante la histórica victoria de los Azulejos en el segundo juego de la doble tanda contra los Orioles. Abajo 1-0 en el séptimo inning y sin haber conectado hits contra Keegan Akin, Guerrero abrió el inning conectando un sencillo contra la banda contraria. Es algo que se le da tan bien como batear bambinazo, y sirvió de chispa para lo que terminó siendo un acto de 11 rayitas y 11 hits para los Azulejos, ambas cifras récord para la franquicia.