Suárez y su “temple”, el arma secreta en la rotación de los Filis
PHOENIX -- Cuando se habla del pitcheo de los Filis, el enfoque tiende a ser sobre Zack Wheeler y Aaron Nola. No es para menos. Los hecho por los primeros dos abridores de la rotación es una de las razones principales por las que Filadelfia está a dos triunfos de avanzar a su segunda Serie Mundial consecutiva.
Sin embargo, después de ellos, los Filis han contando con una ‘arma secreta’: Ranger Suárez.
Puede que el venezolano no sea visto al mismo nivel que Wheeler y Nola por los rivales, pero precisamente eso es lo que lo hace más peligroso como tercero en la rotación de los Filis.
Durante las últimas dos postemporadas, Suárez ha brillado como nadie en la postemporada, instancia en la que suma récord 3-0 con 1.16 de efectividad en un total de 23.1 innings de labor. Los Filis han ganado los siete partidos en los que Suárez se ha subido a la loma, incluyendo un juego salvado que tuvo el año pasado en la SCLN ante los Padres.
Suárez se subirá a la loma de los Filis para el Juego 3 de la Serie de Campeonato de este año ante los D-backs, con el duelo mudándose al Chase Field a partir del jueves. Será allí en donde el zurdo intente continuar esa tendencia y poner a su equipo a las puertas de otro Clásico de Otoño.
“Tenemos que hacer siempre lo que necesitamos para ayudar al equipo a lograr el objetivo”, señaló Suárez. “No lo logramos el año pasado, pero este año queremos hacerlo. Queremos lograr el objetivo ahora”.
Sin embargo, no ha sido un año fácil para el oriundo de Pie de Cuesta, especialmente por las lesiones que empezaron a afectarlo desde antes del inicio la temporada, cuando tuvo que abandonar la concentración de Venezuela para el Clásico Mundial de Béisbol por rigidez en el antebrazo izquierdo. Luego volvió a ser inhabilitado en agosto por un problema en su corva derecha.
“Me siento bien, saludable. Al 100%”, indicó Suárez. “Listo para ayudar al equipo a ganar los juegos que necesitamos. Me perdí dos meses [al inicio] y luego me perdí como 15 días más [en el verano]. Pero ahora mismo me siento al 100% y estoy feliz por eso. Los trainers han hecho un excelente trabajo”.
Todo eso causó que Suárez terminara el año con la efectividad más alta que ha tenido (4.18) en su carrera como abridor. Pero, como todo el equipo de los Filis, una vez empieza la postemporada, todas las inconsistencias quedan atrás.
“Realmente no sé lo qué es, pero para nosotros la postemporada es diferente”, señaló. “Somos un equipo diferente en los playoffs. Yo soy el tipo de lanzador que mientras más lanza, mejor ritmo tiene. Así que el lanzar es lo que más me ha ayudado a ser mejor”.
Es esa actitud y el temple que exhibe en el montículo lo que ha hecho de Suárez el lanzador perfecto para los Filis en esta instancia del año. Algo que su manager, Rob Thomson, suele destacar es la actitud del monticular, y cómo siempre parece estar listo para los momentos grandes.
“Su temple en la loma. Nada parece distraerlo”, expresó el piloto. “No mostró su mejor repertorio por las lesiones, pero una vez nos acercamos al final de la campaña, empezó a lucir. Espero de él siempre una buena apertura, ahora espero que vaya profundo. En sus primeras dos salidas [de la postemporada], pudimos sacarlo un poco más temprano porque teníamos la oportunidad con los días de descanso. Pero ahora tenemos tres juegos seguidos. Esperemos que vaya profundo”.
Suárez hizo dos aperturas contra los Bravos en la Serie Divisional. En la primera cubrió apenas 3.2 innings y en la segunda 5.0 tramos. En total, permitió una sola carrera limpia.
Ya enfrentó a un conjunto desesperado por triunfos. En aquella segunda salida ante Atlanta, los Filis terminaron sentenciando a sus rivales al ganar el cuarto y decisivo juego. Si bien el caso no será el mismo el jueves, sí podría poner a los D-backs en una situación precaria.
Pero, nuevamente, Suárez ha demostrado en los últimos dos años tener el temple necesario para concentrarse en su trabajo y no verse influenciado por los factores externos, construyendo ese temple que tanto le agrada a su timonel.
“Yo creo que se debe a la confianza”, explicó Suárez. Siempre he tenido [confianza en] mí mismo, pero también la que me transmiten mis compañeros. Esa es una de las cosas fundamentales”.
Detrás de Wheeler y Nola, Suárez se ha convertido en el complemento perfecto en la rotación de los Filis. Cuando los equipos finalmente pasan a los dos ases en la rotación de Filadelfia, les toca lidiar con el venezolano, que ciertamente ha demostrado agradarse en el escenario más alto del béisbol.
“Este año tenemos más ganas”, agregó Suárez. “Y tenemos más experiencia”.