Max, JV podrían tener bastante en el tanque

14 de noviembre de 2021

Max Scherzer y Justin Verlander comenzaron lanzando juntos en Detroit, por allá en el 2010. Estuvieron juntos en los Tigres durante cinco temporadas. Scherzer sumó récord de 82-35 en ese período. Verlander, 87-46. Cada uno ganó un Premio Cy Young. Verlander fue cambiado a los Astros, con quienes ganó la Serie Mundial en el 2017. Dos años después, Scherzer alzó el trofeo con los Nacionales.

Scherzer ganaría dos Premios Cy Young más con los Nacionales, haciéndolo en años consecutivos en el 2016 y 2017. Verlander también ganó otro más con los Astros en el 2019, venciendo a su propio compañero Gerrit Cole. Debido a que ambos ganaron la Serie Mundial luego de salir de Detroit, podría decirse que el segundo capítulo en la carrera de ambos fue aun mejor que el primero, hasta que se lesionó Verlander. Y eso es mucho decir.

Scherzer tiene ahora 37 años, en medio de un nuevo paso por la agencia libre. Verlander tiene 38 y también está en el mercado libre, luego de recuperarse de la cirugía Tommy John a la que se sometió en septiembre del 2020. Pero, de cierta manera, los dos vuelven a ser dos nombres importantes, que recibirán mucho interés en el receso de campaña. Mucho ha pasado desde aquellos tiempos en los que ambos estaban al tope de una rotación de Detroit, que era más fuerte que cualquier otra que hayamos visto.

Hubo incluso un período en el que David Price, quien ya había ganado su propio Cy Young con los Rays, y Rick Porcello, quien luego también se llevó el reconocimiento con los Medias Rojas, fueron todos parte de una misma rotación. Sin embargo, esos Tigres nunca pudieron ganar un anillo.

Scherzer es agente libre, luego de ser canjeado a los Dodgers en la fecha límite de cambios pasada. Los Astros le extendieron la oferta calificada de US$18.4 millones Verlander, pero tiene hasta el miércoles para aceptarla o rechazarla. Cuando Verlander tuvo una exhibición la semana pasada el Florida, se informó que lanzó rectas que alcanzaron 97 mph – hubo scouts de hasta 20 equipos viéndolo, incluyendo a los Astros, quienes han dejado claro que quieren tener al monticular de vuelta.

“Lo hemos estado viendo de cerca”, dijo el gerente general de los Astros, James Click. “Ha sido muy amable en decirnos cuándo va a lanzar para que podamos ir a verlo y ver cómo va progresando. Los videos que he visto son increíbles”.

Se piensa que Verlander preferirá ir a la agencia libre, igual que Scherzer, quien se ve en el mercado libre por segunda vez en su carrera. Ambos siguen aquí, profundo en unas carreras que eventualmente los llevarán al Salón de la Fama. Siguen siendo bien cotizados. Existe incluso la posibilidad de que ambos terminen en el sur de California, si Scherzer decide regresar a los Dodgers, y los Angelinos – quienes están desesperados por pitcheo – ingresando en la puja por Verlander.

Verlander y Scherzer. Scherzer y Verlander. Ya no están en la misma rotación, pero sí en la misma conversación de este receso de campaña. Es curioso ver cómo resultan las cosas en el béisbol. Cuando Verlander estaba en los Astros y Scherzer con los Nacionales, compartieron las instalaciones de los Entrenamientos Primaverales en West Palm Beach, Florida, en The Ballpark of the Palm Beaches. Bien lejos del Comerica Park.

Podías hablar en la cueva de los Nacionales con Scherzer y luego ir a ver a Verlander en el otro lado, en el campo de los Astros. Hubo una mañana en febrero del 2020, unas semanas antes de que el COVID-19 obligara a cancelar los campamentos, cuando Scherzer se sentó frente a su casillero y habló sobre el Juego 7 de la Serie Mundial del 2019 y sobre cómo luchó esa noche sin contar con su mejor repertorio, esperando por la remontada de los Nacionales, que eventualmente llegó, para que el club alzará su primer campeonato en la historia de la franquicia.

“Confiaba en que ganaríamos”, confesó Scherzer. “No estaba nervioso. Estaba demasiado emocionado por el momento. Tenía la confianza de que ganaríamos y que yo tenía que hacer mi trabajo esa noche. Eso significaba dejarlo todo en el campo”.

Todo eso luego de sus tiempos juntos en Detroit. Scherzer abrió ese Juego 7, una noche después de que Justin Verlander se subiera a la loma para el sexto encuentro por los Astros, que estaban arriba en la serie 3-2. Verlander lanzó cinco entradas, en las que permitió tres carreras limpias y ponchó a tres. Pero los Nacionales salieron airosos al final. En la noche siguiente, Scherzer completó cinco episodios, le hicieron dos rayitas con siete imparables y ponchó a tres rivales. Nuevamente, su equipo salió con el triunfo.

Verlander y Scherzer. Scherzer y Verlander. De alguna manera, el éxito que lograron juntos en el Comerica Park los ha seguido persiguiendo. Treinta temporadas en las Mayores entre ambos. Uno cumplirá 39 años en el 2022. El otro, 38. Sin embargo, siguen siendo los chicos estelares de aquellos años en Detroit.