PITTSBURGH – Han pasado casi 77 años desde que los Piratas conectaron tantos jonrones en casa como los que empalmaron el viernes ante los Mets. No por nada el equipo encargado de los fuegos artificiales terminó la jornada exhausto.

Pittsburgh exhibió todo su poder conectando siete vuelacercas en el triunfo 14-2 sobre los Mets en el PNC Park.

“Fue un gran partido ofensivo para nosotros”, expresó Bryan Reynolds, quien aportó dos bambinazos, incluyendo un grand slam. “Creo que podemos construir sobre esto, para continuar sólidos el resto del año”.

Los siete bambinazos empataron un récord para la franquicia, que había sido conseguido cuatro veces: el 26 de mayo del 2023 en Seattle, el 20 de agosto del 2003 en San Luis, el 16 de agosto de 1947 ante los Cardenales y el 6 de junio de 1894 en Boston.

Sin embargo, esta fue la primera vez que dan múltiples grand slams en un partido de siete bambinazos y la primera ocasión que conectan dos vuelacercas con las bases llenas desde el 16 de abril de 1996.

No por nada el PNC Park se quedó sin fuegos artificiales después de esos siete bambinazos, como fue anunciado en la pantalla principal del estadio.

Todo ese esfuerzo fue más que suficiente para respaldar otra brillante labor del novato sensación de los Piratas, Paul Skenes, quien se acreditó su quinta victoria de la temporada.