PEORIA, Arizona -- El manager Scott Servais sabía que el temido cuarteto de los Padres venía al bate en el tercer inning del primer partido de los Marineros en la Liga del Cactus el viernes por la tarde. Fue por eso precisamente que le dio la bola al dominicano Prelander Berroa, el prospecto desapercibido que podría rápidamente convertirse en un nombre conocido.

Berroa ponchó al arubeño Xander Bogaerts y al quisqueyano Nelson Cruz como parte de un tercer inning de tres ponches. Luego despachó a los tres bateadores que enfrentó en el cuarto episodio, llamando la atención tanto de la cueva de Seattle, que se ha percatado del potencial de Berroa en las últimas semanas, y la de San Diego, favorito para llegar a la Serie Mundial.

“Estaba un poco nervioso porque obviamente estos son muchachos que crecí viendo”, dijo Berroa. “Pero me dije que tenía que mantener mi compostura y salir y hacer mi trabajo”.

El lanzador de 22 años es el prospecto número 15 de los Marineros, según MLB Pipeline, pero dará un salto cuando los rankings del 2023 sean revelados la próxima semana. Se puede argumentar que el oriundo de Santo Domingo tiene el mejor material de cualquier lanzador en la finca de Seattle, con una combinación de recta y slider que utilizó el viernes. Berroa alcanzó 99 millas por hora con su recta, según los escuchas, a la vez que consiguió strikes con su lanzamiento rompiente.

La velocidad es llamativa, pero es el slider que le abrirá las puertas a las Mayores -- como van las cosas, seguramente esta misma temporada.

Es muy temprano, pero Berroa, a quien los Marineros adquirieron desde los Gigantes a cambio del infielder Donovan Walton en mayo del año pasado, ya luce como una ganga. Berroa firmó con los Mellizos como infielder en el 2026. Esta primavera, está aprendiendo de su compatriota Luis Castillo y el resto del cuerpo monticular de lujo de Seattle.

Berroa, quien se perfila como relevista largo, usó el slider para ponchar a Bogaerts y a Cruz. Dicho lanzamiento despegó en el 2021 cuando, según Berroa, ajustó so forma de agarrarlo.

“Ha sido muy exitoso para mí porque siento que es uno de los pitcheos de mi repertorio que más puedo controlar”, dijo Berroa. “Es con el que puedo darle a la zona de strike cuando quiero”.