¿Podría Céspedes ser cambiado por los Mets?
NUEVA YORK – Los efectos sobre la reestructuración del contrato de Yoenis Céspedes son de amplio espectro. Para el cubano, el acuerdo significa que debe jugar de manera regular para recuperar vía incentivos la mayor porción de su antiguo salario de US$29.5 millones. Para los Mets, el pacto significa un camino menos complicado para el regreso de Céspedes.
También presenta la posibilidad de que Céspedes pueda jugar con otro equipo. Desde que los Mets anunciaron una reducción del sueldo de Céspedes a la mitad el viernes pasado, varios equipos han preguntado por el cañonero en pláticas de canje, de acuerdo con una fuente. Nada es inminente, y la incertidumbre que persiste acerca de la salud de Céspedes podría ser una barrera para cualquier potencial cambio.
Pero ha surgido una nueva posibilidad que no existía hace una semana, cuando el salario garantizado de US$29.5 millones de Céspedes era una carga. Como parte del acuerdo con Céspedes, los Mets recortaron esa cifra por debajo de los US$10 millones, de acuerdo con el New York Post, aunque Céspedes podría ganar de nuevo la mitad del resto mediante incentivos.
Céspedes, de 34 años de edad, insistió en una cláusula que bloqueara cualquier cambio cuando firmó su contrato de cuatro años y US$110 millones previo a la temporada del 2017, pero ahora tendría dos incentivos obvios para prescindir de ella. Primero, trabaja para un equipo que interpuso exitosamente una querella contra él, recuperando parte de su salario tras un incidente en el rancho del jugador a principios de este año. Segundo, está un solo año de convertirse en agente libre, y – dada la condición de sus piernas – su futuro encajaría más como bateador designado en un equipo de la Liga Americana. Los Medias Blancas y Rays son dos equipos que tienen una vacante en dicha posición.
Los Mets continúan en busca de reforzar el bullpen y la receptoría, y ya han hablado acerca de tratar de deshacerse del salario de US$10 millones de Jed Lowrie para despejar la nómina. Céspedes presenta otra avenida para dicho fin.
Por ahora, un potencial canje luce poco probable, en gran parte debido a la incertidumbre que rodea a la salud de Céspedes. El cubano recién comenzó a batear, tirar y correr en las instalaciones de pretemporada de los Mets en Port St. Lucie, Florida, pero Céspedes no ha visto acción en un juego como profesional desde julio del 2018. Los Mets deben de tener un panorama más claro acerca del progreso del cañonero para principios del próximo año, quizás abriendo la puerta para futuras conversaciones con otros equipos durante la temporada.
“Cuando está en su mejor nivel, es un jugador de alto impacto”, declaró el gerente general, Brodie Van Wagenen, la semana pasada durante las Reuniones Invernales en San Diego. “Tenemos que ver cómo se desenvuelve todo esto”.
Refuerzo de lujo de los Mets en la fecha límite de cambios del 2015, Céspedes guio al equipo a la Serie Mundial ese año y después firmó un nuevo contrato de tres temporadas. Luego se salió de dicho pacto tras una sola campaña. Posteriormente firmó un nuevo contrato de cuatro años y US$110 millones, pero sólo ha visto acción en 119 partidos desde entonces.
Tras quedar fuera de acción en julio del 2018, Céspedes fue operado para retirarle una calcificación ósea al talón derecho el 2 de agosto de 2018 y al talón izquierdo el 26 de octubre de ese año. Durante su recuperación, el cubano sufrió múltiples fracturas en el tobillo derecho en un accidente que sufrió en la enorme finca agrícola que posee en Port St. Lucie, Florida, lo cual obligó a los Mets a interponer una querella en su contra. Nueva York retuvo parte del suelo de Céspedes, con el argumento de que el jugador se lesionó durante una actividad prohibida conforme a las garantías de su contrato. La Asociación de Jugadores presentó una inconformidad y las partes acordaron un contrato modificado antes de que el caso llegara más lejos.
La última temporada completa de Céspedes fue en el 2016, cuando el jardinero disparó 31 jonrones y registró OPS de .884 en 132 juegos. El cubano no ha hablado en público desde antes del incidente en su rancho a principios de este año, aunque el jueves, el analista de ESPN Eduardo Pérez hizo referencia a una conversación que tuvo recientemente con el dos veces convocado al Juego de Estrellas.
“Tiene hambre (de jugar)”, le dijo Pérez a MLB Network Radio. “Él me dijo, ‘Estoy listo. No sólo voy con todo este año y no sólo voy a conectar 40 jonrones … veré acción en al menos 140 juegos’”.