Los Yankees tienen récord de 51-18. Han anotado la mayor cantidad de carreras en el béisbol (igualados con los Mets, aunque han disputado menos partidos) y han permitido la menor cantidad. Sin importar cuáles hayan sido tus expectativas con el conjunto al comienzo de la temporada, las han superado con creces.

Están igualados con el tercer mejor comienzo en la historia del club tras los primeros 69 juegos de una campaña – junto a los Yankees de 1928, 1939 y 1998, que terminaron alzando la Serie Mundial. Aparten un momento la rica historia del equipo. Este es el noveno mejor comienzo a lo largo de 69 compromisos en la Liga Nacional o Americana. El resto de los conjuntos en la lista clasificaron a la postemporada y cuatro de ellos ganaron el Clásico de Otoño.

Dado que estamos más profundo en la temporada de lo que parece – cerca del 43% de los juegos de los Yankees ya se han disputado – realmente no es muy arriesgado preguntarnos algo que probablemente los aficionados de los Bombarderos tengan en mente.

¿Está al alcance el récord de 116 victorias, conseguido por los Marineros en el 2001 ¿Qué deben hacer para conseguirlo?

Bueno, claro. Todo es posible. Luego de la victoria del miércoles por 5-4 ante los Rays, tienen una proyección de 120 triunfos. También es verdad que una “proyección” no es la mejor manera de evaluar esto, porque no podemos asumir que todo lo que ha ocurrido volverá a pasar. Aquellos Marineros del 2001, por ejemplo, comenzaron 53-16 sus primero 69 encuentros, dos juegos mejor que estos Yankees, y no llegaron a 120 triunfos.

Es importante pensar en el significado de eso. Primero, los Yankees han contado con la salud de su lado hasta ahora, pese a algunos inconvenientes en el bullpen y un par de pasantías por la lista de lesionados de 10 días de Giancarlo Stanton y Josh Donaldson. ¿Podrán sostener eso, teniendo en cuenta que tienen la alineación de más edad en las Mayores?

Segundo, no está cantado que Aaron Judge, por muy bueno que haya estado hasta ahora, conecte 62 jonrones en el año. Probablemente Anthony Rizzo no termine con 45 vuelacercas. Pero esas son las proyecciones. No hay nada que indique que José Treviño terminará con un OPS+ de 137.

Claro, también puede verse del lado opuesto. Uno podría esperar más de lo que han hecho Aaron Hicks y Joey Gallo hasta ahora. Brian Cashman podría hacer alguna adquisición de peso en la fecha límite de cambios que no estamos teniendo en cuenta. Nuevamente, si siguen contando con una abrumadora ventaja en la división en septiembre, el cubano Néstor Cortés y Jameson Taillon podrían recibir algún tiempo de descanso.

Algo sí es cierto, los Yankees suman 51 triunfos en sus primeros 69 juegos. Esa cantidad no va para ningún lado.

Pero, ¿qué viene ahora?

¿Qué necesitan hacer para ganar 116… o más?

Con registro de 51-18 y un porcentaje de triunfos de .739, los Yankees tienen 93 juegos restantes. Para igualar la marca de los Marineros del 2001, necesitan tener 65-28 y .699 el resto del año. Para imponer un nuevo récord con 117 victorias, tienen que registrar 66-27 y .709 el resto del camino.

Para ser honesto, no suena imposible. Desde el 2000, un equipo ha tenido un período de 93 juegos con un porcentaje de triunfos de .700 en múltiples ocasiones. Los Dodgers del 2017 lo hicieron, igual que los Cardenales del 2004 y aquellos Marineros del 2001, los Atléticos en el 2001 y 2002. Los mismos Yankees lo lograron en 1998 y 1997. No es fácil, pero hay precedentes.

Pero aquí está el truco. Solamente cuatro equipos en los últimos 50 años – los Atléticos del 2001, los Bravos de 1993, los Reales de 1977 y los Rojos de 1975 – lo han hecho terminando una temporada. Este dato destaca la importancia del descanso y las lesiones en el ocaso de la temporada. Es difícil iniciar una campaña así de bien. Pero es aún más difícil terminarla a ese ritmo.

El mejor cierre de los Yankees en sus últimos 93 juegos fue el de los legendarios Bombarderos de 1927, quienes cerraron con marca de 66-27 (.710). Por lo tanto, para romper el récord de victorias de todos los tiempos no sólo necesitan de un inicio histórico. También necesitan de un cierre histórico.

¿Qué les ha pasado a otros equipos que tuvieron un comienzo como este?

Al analizar otras escuadras que han arrancado la temporada con marca de 51-18 (.739) o mejor en sus primeros 69 encuentros, nos damos cuenta de un detalle: Muy pocos equipos han logrado justo eso. Sólo una docena, y varios de ellos lo hicieron en la era re-integración que poco se puede comparar con el béisbol de hoy.

Por lo tanto, en lugar de preocuparnos por el éxito en la postemporada, analicemos simplemente a esos 12 clubes, y comparemos cómo les fue en sus primeros 69 juegos, y luego después de ese trecho. (Recuerden que hasta 1961, la temporada era de solamente 154 partidos).

Los Gigantes de 1912

.809 en sus primeros 69 juegos // .578 el resto del año // -.231

Los Piratas de 1902

.779 en sus primeros 69 juegos // .704 el resto del año // -.075

Los Marineros del 2001

.768 en sus primeros 69 juegos // .677 el resto del año // -.091

Los Cachorros de 1907

.765 en sus primeros 69 juegos // .655 el resto del año // -.110

Los Yankees de 1939

.754 en sus primeros 69 juegos // .659 el resto del año // -.095

Los Atléticos de 1929

.754 en sus primeros 69 juegos // .642 el resto del año // -.112

Los Yankees de 1928

.754 en sus primeros 69 juegos // .576 el resto del año // -.178

Los Gigantes de 1904

.742 en sus primeros 69 juegos // .655 el resto del año // -.087

Los Yankees de 1998

.739 en sus primeros 69 juegos // .677 el resto del año // -.062

Los Tigres de 1984

.739 en sus primeros 69 juegos // .570 el resto del año // -.169

Los Dodgers de 1955

.739 en sus primeros 69 juegos // .560 el resto del año // -.179

Los Atléticos de 1913

.739 en sus primeros 69 juegos // .536 el resto del año // -.203

Entonces: Cada uno de esos 12 equipos que tuvieron esa clase de inicio jugaron peor por el resto de la campaña, para un promedio de porcentaje de victorias de -.133, un recordatorio de lo difícil que es mantener este ritmo ganador durante todo el año. La buena noticia, por supuesto, es que cada uno de ellos terminó con un muy buen récord; en conjunto, jugaron para un porcentaje de victorias de .624, o a un paso de 101 victorias en un período de 162 juegos.

Si los Yankees hicieran justo eso – jugar pelota de .624 por el resto de la campaña – terminarían ganando 109 juegos. Esa marca no impondría ningún récord. Pero seguiría siendo una extremadamente impresionante temporada regular.

¿Qué dicen los pronósticos?

Nos agradan las proyecciones – sistemas como ZiPS, o Steamer, o Bat – porque toman en cuenta el desempeño anterior de cada jugador. Por supuesto, los pronósticos no son perfectos. Por ejemplo, no se pueden pronosticar las futuras lesiones, o qué tipo de jugadores reforzarán el roster vía canjes.

Así terminarían los Yankees según estos sistemas:

FanGraphs: 103-59

Baseball Prospectus: 103-59

Si los Yankees siguen jugando exactamente al mismo ritmo, terminarán ganando 120 juegos. Si los Bombarderos finalizan la temporada al mismo ritmo que esos otros equipos con grandes arranques de año, terminarán ganando 109 partidos. Si logran cerrar como lo dicen las predicciones, su número de victorias será de 103.

Al final, todo lo que verdaderamente importa para los Yankees es ganar ese anhelado 28vo título, sin importar cuántas victorias se consigan en la temporada regular. Después de todo, sólo pregúntenle a los Marineros del 2001.