MIAMI, Florida - Cuando el venezolano Pablo López suba al montículo este domingo contra Puerto Rico en el Clásico Mundial de Béisbol estará en territorio conocido ya que el loanDeport Park fue su hogar durante sus primeros cinco años en las Grandes Ligas.

• Sección del World Baseball Classic

López fue cambiado el pasado enero por los Marlins de Miami junto a dos prospectos a los Twins de Minnesota por su compatriota Luis Arráez, pero el destino lo trae de vuelta al Sur de Florida bajo circunstancias especiales al defender los colores de su patria Venezuela.

"Este es el estadio donde hice mi debut hace cinco años. Jugué con los Marlins durante cinco temporadas. Estoy muy agradecido por eso, y estoy familiarizado con el montículo, con el ambiente y el parque", indicó López previo al partido ante República Dominicana. "Es grandioso lanzar aquí contra Puerto Rico. Creo que el hecho de estar familiarizado con el entorno me da alguna ventaja que voy a aprovechar".

Pero cualquier sentimiento nostálgico que pueda sentir López, pues quedará en un segundo plano ya que tendrá que descifrar a la novena puertorriqueña que ha conquistado el subcampeonato en las pasadas dos ediciones del evento en 2013 y 2017.

"Es una alineación muy potente, y tengo que estar concentrado, haciendo lanzamientos, asegurándome de mi confianza y mis habilidades como lanzador. No tengo que cambiar mi plan. Solo tengo que estar en el montículo enfocado en mi objetivo de hacer mis pitcheos y llevar a mi equipo al triunfo", señaló López, quien tuvo marca de 28-31 con efectividad de 3.94 en 94 aperturas en sus cinco campañas con los Marlins.

"Es una alineación que tiene jugadores muy buenos como Francisco Lindor... creo que es el jugador que más he enfrentado. El año pasado tuve algunos turnos contra Lindor en que fui exitoso y otros en que él fue exitoso. Me conoce y estoy seguro que él le dejará saber a sus compañeros de equipo lo que notó de mí el año pasado. Yo voy a tratar de usar lo que vi el año pasado y tratar de hacer ajustes de acuerdo a la situación de juego", agregó.

El lanzador sostuvo que desde niño soñó con la oportunidad de representar a Venezuela y ahora que le llegó la oportunidad es motivo de gran orgullo.

"Tuve la oportunidad de representar a Venezuela cuando tuve ocho años de edad en un torneo de Pequeñas Ligas en Cartagena, Colombia, y ahora este sentimiento tengo que multiplicarlo por 1,000 porque representar a Venezuela en la plataforma más  importante del béisbol internacional, me llena de mucha orgullo", agregó. "Es un momento que nunca voy a olvidar. Cada día que vengo al vestuario con este grupo de estrellas, es un sueño hecho realidad".