Núcleo joven de K.C. con hambre de más tras primera experiencia en playoffs
KANSAS CITY – Luego de ser guiados por los jugadores más veteranos durante la que fue su primera postemporada, gran parte del núcleo joven de los Reales ahora conoce lo que es jugar béisbol en octubre – y lo que genera una dura eliminación.
Luego de caer 3-1 ante los Yankees en el Juego 4 de la SDLA, Kansas City se despidió de sus aficionados en el Kauffman Stadium. Los jugadores jóvenes, encabezados por Bobby Witt Jr. y Vinnie Pasquantino, tienen ahora la experiencia necesaria para enfocarse en llegar aun más profundo el año que viene.
“Ya experimentamos esto, en juegos de postemporada”, expresó Pasquantino. “No es que no pudimos ganar ningún juego en los playoffs. Ganamos algunos. Así que tenemos esta experiencia ahora, y eso nos debería ayudar el año que viene”.
Witt está en el centro de ese núcleo de Reales. Junto al venezolano Salvador Pérez, fue uno de los líderes del equipo, según el manager Matt Quatraro.
“Son el alma y corazón no sólo de este equipo, sino de la organización, de la comunidad”, dijo Quatraro. “Estamos muy orgullosos de lo que hicieron este año, y esperemos que todo eso continúe”.
Después de batear .332/.389/.588 en su primera temporada como todoestrella, Witt estaba en el centro de atención en esta serie, con la expectativa de rendir en el escenario de octubre. Contribuyó con dos hits importantes en la barrida en la Serie del Comodín de la Liga Americana contra los Orioles, pero comenzó a tener dificultades en la Serie Divisional. Se fue de 17-2 contra los Yankees y luego comentó que le beneficiaría desacelerar el ritmo del juego.
“Es el mismo juego que he jugado toda mi vida”, dijo. “El montículo está a 60 pies, 6 pulgadas de distancia. Son 90 pies hasta la primera base. Sólo tengo que controlar lo que puedo y hacer lo que hago cada día, sabiendo que sólo tenemos que salir, disfrutarlo y divertirnos”.
Pasquantino compartió el mismo sentimiento. El bateador designado superó varios obstáculos: Estuvo a punto de perderse los playoffs después de sufrir una fractura en el pulgar derecho a finales de agosto. Se sometió a una cirugía y luego se rehabilitó de manera agresiva con la esperanza de regresar para octubre.
Sólo cinco semanas después de romperse el pulgar, el nombre de Pasquantino estaba en la alineación para el Juego 1 de la Serie del Comodín contra los Orioles el 1ro de octubre.
“Fue un gran impulso emocional recuperarlo, y me alegra por él. Era algo muy improbable”, dijo Quatraro. “La forma en que lo enfrentó, cómo trabajó desde el minuto en que se lesionó, probablemente de manera incómoda, porque tenía la mano rota, pero volver y mostrar esa determinación y fortaleza dice mucho sobre él como persona, y el equipo lo respeta mucho”.
Aunque hubo dificultades, Witt y Pasquantino están planeando usar lo que aprendieron en esta postemporada para prepararse durante el invierno. Witt dijo que la expectativa de ahora en adelante es llegar a la postemporada cada año.
“Es motivación. Eso es todo lo que hay que decir”, agregó Witt. “Sólo va a hacer que todos en este clubhouse quieran trabajar más duro, y eso es lo que vamos a hacer. Tenemos un equipo increíble. Siento que nuestro grupo fue especial este año, pero vamos a seguir mejorando”.
No hay duda en la mente de nadie en el clubhouse de los Reales sobre lo que estas dos jóvenes estrellas pueden ayudar al equipo a lograr en el futuro. Contribuyeron a llevar de nuevo los playoffs a Kansas City por primera vez desde el 2015, y aunque no fue el final que querían, el tono está establecido para las próximas temporadas.
“Son muy jóvenes, pero son competidores”, dijo el cubano Yuli Gurriel. “Creo que esos muchachos, con el talento que tienen, van a hacer mucha historia y van a ayudar a llevar a este equipo muy lejos”.