Cuando Texas anotó 30: “Sólo queda reírse”
Dicen que todo es más grande en Texas. Y aunque el récord de la Era Moderna para la mayor cantidad de carreras en un juego no ocurrió en el estado, los Rangers llevaron ese espíritu al Camden Yards de Baltimore el 22 de agosto del 2007.
Texas anotó 30 carreras por tres de Baltimore, en lo que fue el primer duelo de una eventual barrida en una doble jornada. La victoria fue tan apabullante que Marlon Byrd, quien dio uno de los dos grand slams de los Rangers en el primer compromiso, describió el evento como “algo extraño”.
“Estábamos ahí afuera sacudiendo nuestras cabezas”, dijo en su momento Byrd.
Y algo aun más difícil de creer es que Texas no anotó ninguna carrera en los primeros tres episodios, en los que incluso se vieron abajo 3-0. Los Rangers anotaron cinco en la cuarta, nueve en la sexta, 10 en la octava y seis en la novena. Como pueden ver aquí, la probabilidad de triunfo de los Orioles se desplomó rápido.
Esa cantidad de anotaciones es la mayor desde que los Colts de Chicago vencieron a los Colonels de Louisville por 36-7 el 29 de junio de 1897, pero Texas se ubica en el tope de las listas entre los conjuntos en anotar 25 rayitas o más desde 1900, año que es considerado como el inicio de la Era Moderna.
Jarrod Saltalamacchia y el puertorriqueño Ramón Vázquez eran los dos bateadores del fondo de la alineación y dieron dos jonrones cada uno y combinándose para 14 carreras empujadas.
“Fue increíble”, confesó Saltalamacchia luego del partido. “Fue ridículo. Nunca había estado en un partido así en toda mi vida. Sólo estábamos dándole a la bola. Sólo queda reírse. No es que ellos cometieran muchos errores. Fue impresionante. Todo el mundo lo recordará”.
Cada Ranger que inició el encuentro dio al menos dos hits y anotó una carrera o más. El conjunto sumó un total de 49 bases alcanzadas – récord para un partido – gracias a 21 sencillos, dos dobles y seis cuadrangulares.
Fue un momento especial para el novato Travis Metcalf, quien había sido ascendido para esa misma la jornada y reemplazó a Michael Young defensivamente en el séptimo inning. Metcalf empalmó el primer cuadrangular con bases llenas, que fue el segundo bambinazo de su carrera ante el derecho de los Orioles, Rob Bell, en la octava.
“Fue increíble, en mayúsculas”, señaló Metcalf.
Al final, los Rangers se fueron de 25-18 (.720) con corredores en posición anotadora.
Los Rangers completaron la barrida en el Juego 2 con un triunfo por 9-7, imponiendo un récord para la mayor cantidad de carreras en una doble jornada en la Liga Americana con 39. La marca antigua era de 36, impuesta por los Tigres de Detroit ante los Carmelitas de San Luis el 14 de agosto de 1937.
“Fue increíble”, expresó el manager de los Rangers en ese entonces, Ron Washington, a MLB.com. “Toda la ofensiva despertó. Nunca había visto algo así”.
Otros datos del juego:
• Los Rangers comenzaron la doble jornada bateando .190 con 10 carreras anotadas en sus cinco partidos anteriores.
• Wes Littleton de los Rangers lanzó tres episodios en blanco desde el bullpen y calificó para su primer salvamento del año, al asegurar una ventaja de… ¡27 carreras!
• Por Baltimore, los imparables y carreras permitidas son la mayor cantidad permitida en su historia.