Te presentamos los 10 mejores “bloopers” del 2022

26 de diciembre de 2022

Por más buenos que sean los jugadores de Grandes Ligas, siguen siendo seres humanos. Gente que comete errores. Personas que hacen cosas como tropezarse y tirarse una taza caliente de café encima mientras revisan la hora. Y así como a nosotros nos pasan esas cosas, los peloteros también tienen momentos bochornosos sobre el terreno. Entonces, tras una sorprendente y emocionante temporada del 2022, repasemos los 10 mejores “bloopers” del año:

10. El truco de la pelota escondida

Es una jugada que parece haber muerto en el béisbol, siendo relegada a las películas de niños. Así que cuando el ligaminorista de los Rangers, Trey Hair, la hizo el 20 de mayo, bueno, no nos quedó otra opción sino pararnos y aplaudirlo.

Claro, puede que no sea el heredero de Marty Barrett, quien perfeccionó la movida, pero cada vez que Hair la haga, tendrá un lugar especial en el béisbol.

9. Un tiro casual… hacia el vacío

El dominicano Jeremy Peña tuvo un gran año. El novato empalmó 22 jonrones, ganó el Guante de Oro y conquistó la Serie Mundial – siendo nombrado como el JMV del Clásico de Otoño. Sin embargo, incluso las mejores estrellas cometen errores.

En el Juego 2 de la Serie Mundial, el quisqueyano corrió por detrás de la intermedia para capturar un rodado de J.T. Realmuto. En vez de cubrir la segunda base, el venezolano José Altuve se agachó como si fuera un personaje congelado en un videojuego.

Así luce una jugada legendaria de béisbol:

8. Dee Strange-Gordon trajo ¿fuego?

En un año en el que los jugadores de posición subieron el montículo más que nunca, algunos de ellos no fueron tan divertidos de ver. Hasta que llegó el “lanzallamas” Dee Strange-Gordon. Enfrentando a Travis d'Arnaud de los Bravos, Gordon lanzó un pitcheo extremadamente… lento.

Desafortunadamente el pitcheo de alguna manera se le escapó a Gordon y terminó golpeando a d'Arnaud, quien se las ingenió para evitar una lesión seria.

7. El “Reino Animal”

Claro, podemos pretender que no somos parte del reino animal. Nos podemos parar en dos piernas, utilizar pantalones (te estamos viendo, Pato Donald) y construir enormes estadios en donde entran 40,000 personas.

Pero de vez en cuando la naturaleza encuentra la manera de seguir su curso. El 20 de junio, cuando los Cachorros visitaron a los Piratas en el PNC Park, una ardilla logró ingresar por las puertas del recinto. Varios trabajadores la persiguieron con una malla. ¿El único problema? Los huecos de la red eran más grandes que la propia ardilla.

Pero esa no fue la única ocasión en la que un animal se apoderó del terreno de juego. En el segundo encuentro de la SCLN, entre los Padres y los Dodgers, un ganso decidió aterrizar en el campo y quedarse ahí un rato.

6. No olvides tu celular

Siempre que salgo de casa, reviso cada bolsillo de mi pantalón para asegurarme de que mi cartera, llaves y –más importante aún – mi teléfono celular estén dentro. El intermedista de los Piratas, el dominicano Rodolfo Castro, olvidó hacer lo contrario cuando corrió las bases en contra de los D-backs el 9 de agosto. Castro recibió la base por bolas en la cuarta entrada y llegó a tercera base con el sencillo de su compatriota Oneil Cruz. Castro se deslizó de cabeza en la antesala para tratar de vencer el tiro y el impacto hizo que su teléfono celular saliera volando de su bolsillo trasero.

El umpire de tercera base, Adam Hamari, vio inmediatamente el teléfono y lo señaló en el suelo. Castro, de 23 años, recogió el teléfono y se lo entregó al coach de tercera base de los Piratas, Mike Rebelo, quien tenía una mirada exasperada antes de cogerlo.

Castro recibió una suspensión de un juego por el incidente.

5. José Azócar se apunta una asistencia

Seguramente habrá asistencias de jonrones más vergonzosas que esta (una de las cuales veremos más adelante). Me refiero a que, este no es un cuadrangular de cabeza al mero estilo del cubano José Canseco. Pero cuando el jugador de los Cachorros, Alfonso Rivas, se voló la cerca gracias a “una manita” de Azócar al estilo dejadita de voleibol, el patrullero central de los Padres vendió bien la jugada al mostrar una cara de extrema incredulidad.

4. Cuando dos estrellas chocan

Les dije que iban a ver un intento de robo de jonrón más feo, ¿verdad? Los Marineros no sólo ayudaron al venezolano Luis Rengifo a apuntarse un cuadrangular, sino que el dominicano Julio Rodríguez y Jesse Winker chocaron en el aire en el proceso. Honestamente, podríamos tratar de recrear esta jugada más de cien veces y nunca lograr lo que estos dos jardineros consiguieron.

3. Un inesperado grand slam de piernas

Hemos visto a muchos jugadores perder una bola en el sol o en las luces. Usualmente, al menos, se encuentran en las mismas inmediaciones que la misma pelota. Pero cuando el dominicano Raimel Tapia conectó un elevado profundo con las bases llenas en contra de los Medias Rojas y estrelló su bate contra el suelo en señal de repulsión, no era el único jugador que estaba confundido. El jardinero central de Boston, Jarren Durán, decidió hacer un cosplay de Tom Hanks en la película "Náufrago" y terminó a la deriva en los vastos jardines del Fenway.

Para colmo, este fue un partido que los Patirrojos perdieron por marcador de 28-5, pero fue la jugada de Durán la que sobresalió de la histórica y humillante paliza.

2. J-Rod y su intento de “nado”

No conocías el vínculo entre el béisbol y la natación, ¿cierto?

El dominicano de los Marineros, Julio Rodríguez, lo demostró en esta jugada en el T-Mobile Park. En la primera entrada, el Novato del Año de la Liga Americana conectó una línea hacia la pared del jardín central y de inmediato pensó en la antesala.

El único problema ocurrió cuando se lanzó de clavado hacia la tercera base.

Rodríguez se tropezó entre la intermedia y la antesala e intentó llegar “nadando” a la base. Fue un esfuerzo tremendo, del cual tal vez el medallista olímpico Michael Phelps se sintiera orgulloso. Pero no fue suficiente para eludir el toque del antesalista de los Azulejos, Matt Chapman.

1. Qué manera de ganar (o perder) un juego

Aunque las instancias previas cuentan con jugadas curiosas y errores, ninguna de ellas afectó directamente el resultado de un juego. Pero cuando los Tigres se midieron a los Mellizos el 26 de abril, el partido terminó con una serie de errores que parecieron ser parte de una comedia.

Minnesota estaba abajo en el marcador 4-3 en la parte baja de la novena entrada cuando el dominicano Miguel Sanó se paró en el plato con el colombiano Gio Urshela y Trevor Larnach en base con un out. Sanó conectó una línea hacia la pradera derecha, pero la pelota rebotó del guante de Robbie Grossman. Error número 1.

Luego de que la bola siguió su curso, Sanó continuó hacia la intermedia, lo que forzó a Urshela y a Larnach a seguir corriendo también. Parecía que los Mellizos estaban encaminándose hacia un out. En vez de eso, el receptor de los Tigres, Tucker Barnhart intentó sacar a un corredor, pero el tiro que hizo terminó en el jardín izquierdo, permitiendo que ambas carreras anotaran y terminara el juego.

Pero la descripción no le hace justicia. Es algo que hay que ver para creer.