DENVER – En el primer día los entrenamientos, el piloto de los Piratas, Derek Shelton, les dijo a sus jugadores que el 2023 iba a ser diferente para Pittsburgh.

“Nos dejó en claro que no sólo se trataba de que nos iba a dar más tiempo de juego y ese tipo de motivaciones este año”, dijo el tercera base Ke’Bryan Hayes después de que los Bucaneros completaran una barrida de los Rockies en el Coors Field con una victoria de 14-3 la tarde del miércoles.

“Queremos ganar ahora mismo”.

Ganar ha sido un sentimiento frecuente para los Piratas en el amanecer de esta temporada. Su más reciente triunfo fue una convincente paliza para coronar su primera serie por barrida en Denver desde septiembre del 2019. También fue la segunda serie ganada por barrida este año para Pittsburgh, que se ha convertido en el equipo sorpresa de Grandes Ligas hasta ahora con marca de 12-7.

Fue un día histórico en varios frentes. Con 14 carreras, los Piratas anotaron 33 veces en la serie de tres encuentros, la mayor cantidad en cualquier serie de tres choques desde que acumularon 34 carreras frente a los Padres del 28 al 30 de julio del 2000.

Las 14 rayitas llegaron con 18 hits, de los cuales la mayoría fueron batazos duros. De hecho, por primera vez desde que la tecnología de Statcast fue implementada en 2015, los Bucaneros pusieron 15 bolas en juego con una velocidad de salida de más de 100 millas por hora. Nada mal para un club que prescinde ahora mismo de su mayor cañonero, el dominicano Oneil Cruz, quien está fuera de acción por una fractura en su tobillo izquierdo.

Fue mas que sólo el orden al bate haciendo cosas que los Piratas no habían logrado en mucho tiempo. Con seis sólidas entradas, el derecho cubano Johan Oviedo registró la novena salida de calidad consecutiva para Pittsburgh. La última vez que los Piratas tuvieron nueve salidas de calidad o más seguidas fue del 30 de junio al 8 de julio del 2015 (también nueve).

Los Piratas lucieron implacables el miércoles, de la misma manera en que lo han hecho durante las primeras tres semanas de la campaña. Pocos esperaban que ganaran 12 de sus primeros 19 compromisos, particularmente cuando su calendario incluye series contra los Medias Rojas, Medias Blancas, Astros y Cardenales. Pero existe algo cualitativamente diferente con la escuadra de este año.

“Cuando agregas a jugadores veteranos – cuando agregas a [Andrew McCutchen] y [al dominicano Carlos] Santana – y con Bryan Reynolds teniendo otro gran año, y luego los jóvenes están comenzando a progresar, [genera un gran impacto]”, declaró Shelton. “Y creo que la energía en nuestra cueva desde el juego inaugural de la temporada ha sido diferente. Creo que existe un nivel diferente de creencia en ellos”.

El engranaje de los veteranos recién llegados como McCutchen, Santana y el zurdo Rich Hill con estrellas jóvenes como Reynolds, Hayes y Cruz parece estar produciendo un inesperado éxito inicial – al menos desde la perspectiva del amplio mundo del béisbol. Pero está lejos de ser algo inesperado para los jugadores que abandonaban el clubhouse de los visitantes en el Coors Field mientras abordaban un vuelo a casa para disputar series contra los Rojos y Dodgers.

“Creo que, en los últimos años, éramos bien jóvenes y no teníamos realmente a esa persona clara en nuestro vestuario con una trayectoria reconocida y la experiencia de haber jugado en equipos ganadores”, manifestó Hayes. “Entonces, estamos tratando de ver la manera de lograr justo eso y creo que ahora éste es el tercer año con muchos jugadores que ya se conocen entre ellos. Creeo que todo tiene sentido.

“Y luego cuando agregas a jugadores como Cutch, Santana, Ji-Man Choi, que ya tienen experiencia en Serie Mundial y cosas así, ver la manera en que se manejan es de gran valor para nosotros”.