Los 10 mejores momentos en la carrera de Johan Santana

13 de marzo de 2025
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MINNEAPOLIS -- La carrera de quizá no lo haya llevado (aún) al Salón de la Fama debido a las lesiones que acortaron su trayectoria, pero cuando estuvo en su mejor momento, con su característico cambio de velocidad desconcertando a los bateadores una y otra vez, pocos podían hacerle frente a su dominio absoluto.

Doce años quizá no parezcan una carrera corta, pero el final de la trayectoria del zurdo podría haber sido más llevadero de no haber sido por los problemas en el hombro que repentinamente frenaron su ascenso. Aun así, dejó un legado imborrable en la historia de los dos equipos cuyos uniformes vistió. En esta lista de los 10 mejores momentos de su carrera, repasamos el impacto que el zurdo venezolano tuvo tanto en los Mellizos como en los Mets.

1. El primer no-hitter en la historia de los Mets

1ro de junio del 2012

El mayor triunfo de Santana sobre el montículo fue inolvidable e histórico, aunque con un matiz agridulce en retrospectiva. A sus 33 años, el zurdo, que venía de una cirugía en el hombro ya no tenía los deslumbrantes números de ponches de su mejor época, pero mantenía una sólida efectividad de 2.75 antes de aquella apertura en el Citi Field contra los Cardenales. Y tenía suficiente en el tanque para regalarles a los 27,069 aficionados presentes una noche histórica para los Mets.

Ninguno de los grandes lanzadores en la historia de la franquicia, ni Tom Seaver, ni Dwight Gooden, ni Jerry Koosman, había logrado un juego sin hit ni carrera con el uniforme de los Mets. Eso cambió esa noche. Un batazo del puertorriqueño Carlos Beltrán en la sexta entrada fue decretado foul, manteniendo viva la hazaña, y una espectacular atrapada de Mike Baxter en la séptima, estrellándose contra la barda del jardín izquierdo, hizo que el sueño pareciera aun más posible.

Con su envío número 134 de la noche, Santana hizo que David Freese abanicara para el último out, completando la gesta. Pero ¿a qué costo? Se especula ampliamente que el alto conteo de pitcheos, apenas dos meses después de su regreso de la lesión, influyó en su declive posterior. En sus siguientes 10 aperturas, tuvo una efectividad de 8.27, terminó la temporada en la lista de lesionados, requirió de otra cirugía en el hombro la siguiente primavera y nunca volvió a lanzar en las Grandes Ligas.

2. La triple corona

2006

Para este momento, Santana ya era no sólo uno de los mejores lanzadores de la Liga Americana, sino de todo el béisbol. Había ganado el Premio Cy Young en el 2004, terminado tercero en la votación en 2005 y liderado la liga en ponches en ambas temporadas. Estadísticamente, su campaña del 2006 quizá no haya sido tan dominante como la del 2004, pero las estrellas se alinearon para que su nombre quedara registrado en los libros de la historia.

Un abril complicado dio paso a la mejor versión de Santana en la recta final de la campaña, en la que terminó como líder indiscutible en efectividad (2.77) y ponches (245). Todo dependía de las victorias, y el zurdo perdió un solo juego en sus últimas 11 aperturas, lo que lo dejó en una gran posición para conquistar la Triple Corona.

Llegó a su última salida el 26 de septiembre necesitando un triunfo más para asegurarse al menos un empate con el derecho de los Yankees, Chien-Ming Wang. Santana respondió con ocho sólidas entradas en el Metrodome contra los Reales, asegurando no sólo la triple corona de pitcheo de la Liga Americana, sino la primera en Grandes Ligas desde la de Dwight Gooden en 1985.

3. La apertura de 17 ponches

19 de agosto del 2007

Éste fue Santana en su mejor versión, y terminó siendo una de sus últimas actuaciones en el Metrodome con el uniforme de los Mellizos. Los Rangers simplemente no pudieron descifrar su cambio de velocidad y eso quedó claro desde el inicio, cuando el zurdo ponchó a cinco de los primeros seis bateadores que enfrentó y sumó al menos dos ponches en cada una de las primeras cinco entradas.

El primer hit que permitió llegó en la quinta entrada y, aunque no recetó ponches en la sexta, dejando su cuenta en 11, regresó en la séptima para abanicar a los tres bateadores del capítulo. Luego, en la octava, enfrentó a Gerald Laird, al dominicano Nelson Cruz y a Jarrod Saltalamacchia y los retiró en fila con ponches, alcanzando un récord personal de 17 ponches en un solo partido.

Esa marca sigue siendo el récord de los Mellizos hasta el día de hoy.

4. La victoria en postemporada

3 de octubre del 2004

Antes de que los Mellizos cayeran en la racha de derrotas en postemporada más larga en la historia de las cuatro principales ligas deportivas de Norteamérica, Santana se subió al montículo del Yankee Stadium en el Juego 1 de la Serie Divisional de la Liga Americana y superó en un duelo de lanzadores al futuro Salón de la Fama Mike Mussina. Con siete entradas en blanco, el venezolano guio a Minnesota a una victoria por 2-0 y puso al equipo en ventaja en la serie al mejor de cinco.

No fue su actuación más dominante, ya que permitió nueve hits y una base por bolas, con al menos un bateador de los Yankees embasándose en cada una de sus siete entradas. Sin embargo, cuatro jugadas de doble matanza, incluida una asistencia de Torii Hunter para poner out al puertorriqueño Jorge Posada en el plato, ayudaron al ganador del Cy Young a completar su labor.

5. Salvando la temporada de los Mets... con una pierna lesionada

27 de septiembre del 2008

Las esperanzas de los Mets en la postemporada, así como la vida del Shea Stadium, se desvanecían en el tramo final de la temporada del 2008. El equipo se enfrentaba a un partido de vida o muerte contra los Marlins en el penúltimo juego del calendario, aferrándose a su última oportunidad en la lucha por el Comodín de la Liga Nacional. Fue entonces cuando Santana, líder de efectividad del circuito, se subió al montículo con apenas tres días de descanso tras haber hecho 125 pitcheos en su salida anterior contra los Cachorros.

Ésa era precisamente la clase de situaciones para las que los Mets habían adquirido a Santana en un cambio con los Mellizos. Tras recibir el visto bueno del timonel Jerry Manuel, el zurdo respondió con una joya de nueve ponches en una blanqueada de 117 pitcheos, manteniendo vivas las esperanzas de su equipo hasta el último día de la campaña. Aun más impresionante fue que, tiempo después, se reveló que Santana lanzó esa joya con un menisco roto en la rodilla izquierda, lesión que requirió de una cirugía en la temporada baja. Pero en aquella tarde, no parecía afectarle en lo absoluto.

6. La segunda mitad de la temporada del 2004

julio-septiembre del 2004

Así es como se cierra con broche de oro una campaña digna del Cy Young. Los Mellizos se adueñaron del título de la División Central de la Liga Americana por tercera temporada consecutiva, y Santana encabezó la carga con una segunda mitad de temporada simplemente espectacular. Durante ese lapso, el zurdo no perdió juego alguno, cerrando el año con récord de 13-0 en sus últimas 15 aperturas, acompañado de una efectividad de 1.21, 129 ponches y apenas 55 imparables permitidos en 104.1 episodios.

Los Mellizos ganaron 14 de esas 15 aperturas, lo que selló la candidatura de Santana como el indiscutible ganador del Premio Cy Young, el primero para un lanzador de Minnesota desde Frank Viola en 1988.

7. Cambio a la Liga Nacional

2008

Tras meses de especulación, los Mellizos finalmente enviaron a su as de toda la vida a los Mets después de la campaña del 2007, recibiendo a cambio al dominicano Carlos Gómez, Kevin Mulvey, Philip Humber y el venezolano Deolis Guerra. Nueva York firmó a Santana a un contrato de seis años y US$137.5 millones, una oferta que Minnesota no podía igualar.

El nuevo as de los Mets prosperó bajo los reflectores de la Gran Manzana, liderando la Liga Nacional con promedio de carreras limpias de 2.53, la mejor de su carrera, en un máximo personal de 234.1 entradas. Llevó a los Mets al borde de la clasificación como Comodín de la Liga Nacional y cerró su quinta campaña consecutiva terminando entre los mejores cinco en la votación del Cy Young. Sería la última antes de que las lesiones comenzaran a afectar su carrera.

8. La llegada del cambio de velocidad

28 de julio del 2002

Antes de la temporada del 2002, Santana sólo buscaba mantenerse en las Grandes Ligas. Primero, como selección de la Regla 5, lo que obligaba a los Mellizos a mantenerlo en el roster todo el año, y luego, como un joven lanzador intentando afianzarse en una rotación abridora. A inicios de ese año, trabajó en las ligas menores para perfeccionar su cambio de velocidad y aprender a confiar en él en cualquier cuenta. Cuando regresó al equipo grande de los Mellizos, era un lanzador diferente.

Después de haber ponchado a apenas 92 bateadores en 129.2 entradas en sus primeras dos campañas de MLB, Santana mostró su renovada capacidad para generar swings fallidos en una apertura contra los Azulejos en julio. Ese día, lanzó ocho entradas en blanco, permitió apenas dos hits y recetó 13 ponches, una primera muestra del dominio que vendría una vez que Minnesota lo consolidara en su rotación.

9. Tú a tú con Pedro Martínez

1ro de agosto del 2004

En medio de la histórica segunda mitad de la temporada del 2004, el dominicano Pedro Martínez, tres veces ganador del Cy Young, permitió dos carreras y ponchó a 11 por los Medias Rojas en su visita al Metrodome, pero Santana fue más.

El zurdo venezolano se mantuvo una entrada más en el montículo que el futuro Salón de la Fama, ponchó a 12 bateadores en ocho episodios y su ofensiva lo respaldó con anotaciones contra el relevista Mike Timlin para que Santana se llevara el triunfo en este memorable duelo de lanzadores.

10. Su primer (y único) jonrón

6 de julio del 2010

Siendo un lanzador de la Liga Americana durante la primera mitad de su carrera, no sorprende que Santana no tuviera grandes números al bate tras llegar a los Mets. Sin embargo, pocos recuerdan que, en su juventud en Venezuela, comenzó como jardinero antes de que los Astros lo firmaran como lanzador.

Santana tuvo que esperar casi hasta el final de su carrera para conectar un cuadrangular, pero finalmente lo logró en su penúltima temporada en Grandes Ligas. En un duelo contra los Rojos, Santana conectó una línea que pegó en el poste de foul del jardín derecho ante Matt Maloney. Y lo hizo en un enfrentamiento de zurdo contra zurdo, logrando así su único jonrón en MLB antes de dar su primer y único trote por las bases.

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Do-Hyoung Park está a cargo de la cobertura de los Twins para MLB.com.