CHICAGO -- Una de las rachas más singulares del béisbol continúa alargándose.

Los Dodgers llegaron al primer juego de la serie del lunes contra los White Sox con un récord de 22-0 esta temporada cuando el venezolano Miguel Rojas ha dado al menos un hit. No sólo esa seguidilla se extendió a 23-0 con una victoria por 3-0 en el Guaranteed Rate Field, sino que Rojas inició el ataque que decidió el partido.

“No lo sé”, declaró Rojas. “Eso es parte de mi trabajo, tratar de embasarme, tratar de dar hits. Me siento contento de que el equipo ha estado encontrando la manera de ganar en cada ocasión”.

Rojas comenzó el séptimo inning con un doble hacia la esquina del jardín izquierdo contra el derecho Steven Wilson. Anotó dos bateadores después, cuando el puertorriqueño Enrique “Kike” Hernández conectó un doble impulsor por la línea de left field, rompiendo el empate a cero.

“Los números no mienten”, destacó Hernández. “Cuando [Rojas] conecta de hit, nosotros ganamos”.

Rojas terminó la noche de 4-2, agregando un sencillo en la cuarta entrada. El jugador de 35 años comenzó como campocorto por sexta vez en siete juegos desde que Mookie Betts se fracturó la mano izquierda el 16 de junio.

Rojas dijo que se enteró de la racha por primera vez hace algunas semanas, durante la serie de los Dodgers frente a los Yankees en Nueva York. El venezolano también reconoció que es un tema difícil de ignorar, tomando en cuenta todos los mensajes que los fanáticos le han enviado en ese sentido a través de las redes sociales.

“El amor de parte de los fans de los Dodgers y de la gente que está observando el béisbol, ellos piensan que es algo genial”, manifestó Rojas. “Es una racha bien genial. No lo voy a negar. Simplemente seguiré divirtiéndome con ello. Pero al final del día, no importa si doy o no un imparable. Lo más importante siempre será ganar como equipo”.

Rojas bateó .236/.290/.322 en 124 juegos la pasada campaña. En 49 compromisos este año, tiene una línea ofensiva de .284/.324/.440. En contexto, su mejor porcentaje de slugging en una temporada de 162 juegos es de .392, en el 2021 con los Marlins.

Con Betts pautado para estar fuera de acción durante seis a ocho semanas, se espera que Rojas asuma un papel aún más destacado para los Dodgers.