Jóvenes de los Orioles quieren seguir brillando en octubre
BALTIMORE -- De 2012 a 2016, ningún equipo de la Liga Americana ganó más juegos que los Orioles. Pusieron récord de 444-366 durante ese lapso, llegando a la postemporada tres veces. Pero ninguno de esos conjuntos de Baltimore ganó 100 encuentros en una temporada.
Los Orioles de 1997 se llevaron de punta a punta el Este de la L.A., liderando la división desde el Día Inaugural hasta el último día de la temporada regular. Pero no ganaron 100 duelos. Terminaron con foja de 98-64.
Cal Ripken Jr., el mejor jugador de la historia de la franquicia, formó parte de algunos equipos especiales de los Orioles durante sus 21 años de carrera (1981 a 2001), todos ellos en Baltimore. Nunca fue miembro de un equipo ganador de 100 partidos.
Los Orioles de este año terminaron con una foja de 101-61, la quinta mejor temporada regular de la historia del equipo y la mejor desde 1979 (102-57). Alcanzaron la centena de victorias por primera vez desde 1980 (100-62).
¿Se da cuenta el joven núcleo de Baltimore de lo especial que ha sido este logro?
“Creo que es difícil cuando estás en medio de ello”, dijo el novato Gunnar Henderson. “Pero estoy seguro de que el día en que nos retiremos y podamos mirar atrás a las temporadas, poder ver lo raro que es será bastante genial”.
Henderson, de 22 años, no se retirará pronto. Tampoco el receptor Adley Rutschman, de 25 años. Ni el diestro Grayson Rodríguez, de 23 años. O Jordan Westburg, de 24 años. Ni el zurdo DL Hall, de 25 años.
Estas estrellas emergentes acaban de llegar. Y con los Orioles en la postemporada por primera vez desde el 2016 - coronados campeones del Este de la L.A. por primera vez desde el 2014 - esos jóvenes estarán ahora bajo la mirada de una audiencia nacional.
Durante el tiempo que Baltimore se mantenga con vida este octubre, una historia popular seguramente será cómo el equipo llegó a este nivel más rápido de lo que muchos fuera de la organización pensaron que lo haría. Todo el mundo sabía que el gerente general Mike Elias y la oficina principal de los Orioles estaban acumulando jóvenes talentos, pero es posible que esas miradas externas no esperaran este tipo de resultados apenas un puñado de grandes promesas llegaran a las Grandes Ligas.
Sin embargo, no es una sorpresa para el núcleo joven de los Orioles. Rutschman, Henderson, Rodríguez y Hall pasaron días en el campo de entrenamiento alterno durante la temporada 2020, acortada por la pandemia, hablando sobre cómo sería para todos ellos llegar a las Grandes Ligas y llevar a Baltimore al éxito. Cada uno sabía que era posible una vez que llegaran allí.
Desde que Rutschman llegó en mayo del 2022, los Orioles no han sido barridos en una serie (una racha activa de 91 series de varios partidos). Henderson, que debutó el 31 de agosto del 2022, sólo sabe lo que es estar peleando por la postemporada, pues Baltimore se quedó a tres juegos de un puesto de Comodín la campaña pasada.
Antes de comenzar el 2023, los Orioles sabían que más talento joven estaba en camino para ayudar al club grande. Por eso pudieron ignorar a los expertos que pronosticaban un retroceso porque su temporada muerta había sido “demasiado tranquila”.
Los prospectos más experimentados que abrieron el año en las menores -- como Rodríguez, Westburg y Hall -- estaban motivados para ser llamados y unirse a la diversión.
“En las ligas menores, sólo estaba concentrado en tratar de ser parte de este equipo”, contó Westburg, quien debutó el 26 de junio. “En realidad no pensaba en otra cosa que no fuera: ‘Hermano, qué ganas tengo de subir ahí arriba y qué ganas tengo de contribuir y qué ganas tengo de formar parte de ese equipo’”.
“Porque me daba cuenta de que algo se estaba armando. Me di cuenta de que la energía era diferente en los entrenamientos de primavera y que todo el mundo en el club estaba centrado en ganar partidos”.
Baltimore ha ganado mucho. Sólo necesita 11 victorias más para conquistar la cuarta Serie Mundial en la historia de la franquicia. Ése es el objetivo.
Pero el objetivo también es volver a la postemporada en 2024, y luego los años siguientes. Porque este es el primer viaje a octubre para las estrellas emergentes de los Orioles, pero es poco probable que sea el último.
“Ahora, no hay vuelta atrás”, aseguró Rutschman. “Es como, ‘Tienes que llegar a esto, porque este es el nuevo objetivo”.
Añadió Henderson: “Esto es lo que vamos a esperar en los próximos años”.