Funcionarios de R.D. orgullosos de ver exaltado a Ortiz
COOPERSTOWN, Nueva York – David Ortiz es una de las mayores figuras en la historia deportiva de la República Dominicana, con una trayectoria culminada con su exaltación este domingo como cuarto nacido en la media Isla Hispaniola con placa en el Salón de la Fama del Béisbol.
En ocasión de un momento tan importante, son varios funcionarios gubernamentales de la República Dominicana que hicieron acto de presencia en el Clark Sports Center de Cooperstown para ver la ceremonia de Ortiz, el cubano Tony Oliva y Jim Kaat, junto a los reconocidos de manera póstuma: El también cubano Orestes “Minnie” Miñoso, Gil Hodges, Buck O’Neil y Buck Fowler.
El Ministro de Deportes de la República Dominicana, Francisco Camacho, fue parte de la delegación que celebró la exaltación de Ortiz, cuarto dominicano en el Salón de la Fama después de Juan Marichal (1983), Pedro Martínez (2015) y Vladimir Guerrero padre (2018).
“Es uno de los más luminosos para nuestro deporte, al igual que los primeros tres exaltados”, dijo Camacho. “(Con Juan Marichal) se inició este tránsito de los dominicanos hacia el Pabellón de la Fama”.
Ortiz es el segundo bateador quisqueyano con placa en Cooperstown, después de Guerrero. “Big Papi” se hizo sentir en 20 temporadas de Grandes Ligas con los Mellizos y, sobre todo, los Medias Rojas, donde conectó 483 de sus 541 jonrones, fue convocado a cada uno de sus 10 Juegos de Estrellas y ayudó a Boston a ganar sus primeros tres títulos de Serie Mundial desde 1918.
“A agradecer a Dios por la oportunidad de estar compartiendo un día tan especial para el pueblo dominicano y para el pueblo de Norteamérica, que también es gran admirador de nuestro Big Papi”, expresó Junior Noboa, Comisionado de Béisbol de la República Dominicana, exjugador y gerente general del Escogido—equipo de Ortiz en la liga invernal de dicho país—y ejecutivo de los Diamondbacks de Arizona. “Por eso hoy estamos en este día de su exaltación al Salón de la Fama”.
La popularidad de Ortiz siempre se ha visto en Boston y en la República Dominicana, lo cual se refleja con la multitud que se ha visto en Cooperstown para esta ceremonia.
“Esto es indetenible”, manifestó Camacho. “Esto de David Ortiz es un ejemplo para cada uno de nuestros jóvenes dominicanos, que con disciplina y compasión, se llega, sin importar la clase social a la que pertenece.
“(Ortiz) es una persona sencilla. Es una persona que se da a querer”.
Agregó Noboa: “Una personalidad única, un jugador con un liderazgo tanto dentro como fuera del terreno de juego. Para mí, más grande ser humano que jugador”.