¿Ya está Altuve en el Top 5 histórico de jugadores venezolanos?

Cada semana en LasMayores.com, Sabor en Números se enfoca en datos, estadísticas y curiosidades sobre lo hecho por el contingente de jugadores latinoamericanos en las Grandes Ligas durante los últimos siete días. Puedes leer la edición anterior aquí.

REPÚBLICA DOMINICANA

¿Splinker? Sí, un nuevo pitcheo

“No puedo ni describir lo envenenado de ese pitcheo. Eso no es justo”.

La frase la dijo un maravillado Dennis Eckersley, el connotado ex cerrador, miembro del Salón de la Fama y comentarista de los Medias Rojas. El recipiente del elogio fue el dominicano Jhoan Duran. O más bien, un pitcheo que acababa de hacer el relevista de los Mellizos contra su compatriota Rafael Devers la semana pasada.

¿Por qué?

No fue por la ubicación, pues el pitcheo terminó siendo una bola mala.

¿La velocidad?

El pitcheo iba a 100.8 millas por hora. Muy rápido, pero el propio Durán ha pasado de las 103 mph este año. No, tampoco fue por eso.

Lo que dejó boquiabierto a Eckersley, y a todo el mundo, es que el pitcheo fue una splitter, o recta de dedos separados. Pueden ver perfectamente en el video como se hunde antes de llegar al plato. Y eso, un lanzamiento “lento” de más de 100 mph, era algo que jamás se había visto.

Desde que con la tecnología Statcast empezó a rastrear todos los envíos que se hacen en cada estadio de Grandes Ligas en el año 2015 y hasta la jornada del lunes, se habían hecho un total de 11,705 pitcheos a 100 mph o más rápidos. Y cada uno de ellos había sido en recta.

Esa splitter de Durán, o “splinker”, como también le dicen al pitcheo en el clubhouse de los Mellizos, fue el primer envío “lento” tirado en la Era Statcast que toca las 100 mph. Uno de 11,705. Vaya proporción. Y aunque es verdad que el béisbol no empezó en el 2015, no hay ningún registro, ni nada que sugiera que antes de la llegada de Statcast alguien haya sido capaz de lanzar un “off-speed” a 100 mph.

Los pitcheos del novato Durán, en su primera campaña en las Mayores, no sólo son impresionantes. También son muy efectivos. El derecho no ha permitido carreras en 17 de sus últimas 18 presentaciones, lidera a los relevistas de los Mellizos con 76 ponches, sólo ha otorgado 13 boletos y exhibe una efectividad de 1.82.

El de Durán es un dominio con pocos precedentes entre novatos. De acuerdo con Stathead de Baseball-Reference, el pitcher de 24 años es uno de sólo tres novatos en la historia (mínimo 50 innings) con promedios de 10 o más ponches y dos o menos boletos por cada nueve innings, y efectividad de 2.00 o mejor. Los otros son el también dominicano Rafael Soriano (Marineros, 2003) y el coreano Seunghwan Oh (Cardenales, 2016).

Otro zurdo, otro jonrón

Albert Pujols bateó el domingo el jonrón 695 de su carrera, un cañonazo mágico viniendo desde la banca para romper la igualada a cero ante los Cachorros y liderar el triunfo 2-0 de los Cardenales. ¿Y a quién se lo bateó? A un zurdo, claro, sus víctimas preferidas esta temporada. Con el cuadrangular ante Brandon Hughes (el 451er pitcher distinto al que se la bota, otro récord), Pujols elevó todavía más sus números contra zurdos. Tras la jornada del lunes, la leyenda dominicana estaba bateando .370/.412/.790 con 12 jonrones y un OPS de 1.202 versus pitchers de esa mano.

¿Tremendos números? Mírenlo de esta forma. Hasta la temporada pasada, sólo seis jugadores nacidos en Latinoamérica habían terminado una campaña (mínimo de 100 apariciones legales) con un OPS de 1.200 o mejor y al menos 10 jonrones contra pitchers zurdos: el puertorriqueño Juan González (1996), los dominicanos Sammy Sosa (2001, 2002), Aramis Ramírez (2007) y Nelson Cruz (2019), el venezolano Miguel Cabrera (2013) y el propio Pujols en el 2008, en plena cúspide de su carrera. Y aquí anda otra vez Don Albert, casi 15 años después, todavía aterrorizando a los zurdos, metido entre los líderes de la Liga Nacional contra siniestros en promedio de bateo (3ro), jonrones, (2do) slugging (2do) y OPS (3ro).

VENEZUELA

Permiso, Vizquel

Jose Altuve sigue consolidando una de las mejores temporadas de su carrera con una segunda mitad digna de sus días de gloria (batea .319/.390/.528 desde el Juego de Estrellas) y se colocó a tiro de superar a Omar Vizquel en WAR y subir al cuarto lugar de todos los tiempos de esa categoría entre los jugadores de posición venezolanos. El segunda base de los Astros tiene un WAR de 45.5, pisándole los talones a Vizquel (45.6), a quien salvo un bajón inconcebible en este último mes va a superar antes de que termine la temporada. Después de Vizquel, está el podio de los venezolanos en esa estadística tan controversial, pero tan útil, por su capacidad de considerar y ponderar todas las formas de aportar para la causa de su equipo que tiene un jugador. La medalla de oro es de Miguel Cabrera con un WAR de 67.9. El segundo escalón lo ocupa Bob Abreu con uno de 60.2. Finalmente, en el tercer puesto está el único venezolano en el Salón de la Fama, Don Luis Aparicio, que se retiró – muchos años antes de que se inventará el WAR – con uno de 55.9.

¿Hasta dónde llegará Altuve? Si termina esta temporada con un WAR de 46.0, una cifra conservadora, podría ponerse muy cerca de Aparicio antes de que termine su actual contrato en el 2024. Para igualar a Aparicio en 55.9, necesitaría un WAR de 9.9 entre 2023 y 2024, por arriba de su promedio de las últimas dos temporadas (8.6). Tomando en cuenta que tendrá ya 33 años en el 2023, pasar a Aparicio luce como algo más factible para el 2025. Entonces, sólo le quedarían Abreu y Cabrera por delante.

En el 2025 ya Altuve jugaría con 35 años. Una edad considerable. Y es imposible saber cómo lo tratarán las lesiones el resto del camino. Cualquier proyección que hagamos no es más que elucubrar. Pero sí podemos ver qué hicieron otros dos talentosísimos jugadores de cuadro venezolanos, también de baja estatura, después de los 35 años. Aparicio jugó otras cinco campañas a partir de ese punto (1969-1973) y acumuló un WAR de 13.7 para redondear su 55.9 vitalicio. Vizquel jugó 11 campañas más a partir de los 35 años, del 2002 al 2012, y en ese trayecto sumó un WAR de 14.1.

Por redondear, digamos que Altuve sumará un WAR de 15.0 después de los 35. A primera vista puede parecer una cifra conservadora, porque el maracayero es mejor bateador de lo que jamás llegaron a ser Aparicio y Vizquel. Pero no es ni tan buen corredor (especialmente comparado con Aparicio), ni tan buen defensor. Y eso también lo valora el WAR. ¿Aún les parece poco? Consideren que, después de los 35 años, el WAR de Cabrera es de -1.1. El de Abreu fue de 5.6. ¿Y el de Andrés Galarraga entre los 35 años y el resto de su carrera? 14.6. Así que ese 15.0 para Altuve después de los 35 años, un número que lo pondría por encima de 70.0, es más bien bastante optimista. Producir a esa edad, y a ese nivel, es complicado. Pero de lograrlo, sería suficiente para pasar a Cabrera y quedarse solo en la cima entre los venezolanos. ¿Lo conseguirá?

Lluvia y sequía

El venezolano Cesar Hernandez, segunda base de los Nacionales, puso fin el domingo a una racha de 155 juegos sin conectar cuadrangulares, una cadena que comenzó a finales de agosto del año pasado y a la que finalmente pudo mandar a dormir con el batazo que le pegó a Trevor Williams de los Mets. La racha era considerable, pues entre los jugadores activos sólo el dominicano Magneuris Sierra (223 encuentros) de los Angelinos y el jardinero de los Guardianes, Myles Straw (157 juegos), tenían una más larga hasta la jornada del domingo.

Pero lo realmente llamativo de la seguidilla de juegos sin conectar jonrones del veterano ambidextro de 32 años es que en la campaña pasada Hernández pegó 21 cuadrangulares, el tope de su carrera. Y ahora tuvo que esperar 495 veces al bate para dar su primero del 2022. Si les parece que son demasiados turnos de espera, pues lo son. Le preguntamos al Elias Sports Bureau si alguna vez un jugador, después de dar 20 jonrones, tuvo que esperar tantos turnos para dar su primer bambinazo la temporada siguiente, y la respuesta es no. Desde 1900, la cadena de 495 veces al bate de Hernández no sólo es la más larga; es casi el doble de grande de la que le sigue, una de 246 turnos en el 2014 de J.J. Hardy, quien venía de batear 25 bambinazos en el 2013. El entonces campocorto de los Orioles terminó dando nueve en el 2014. ¿Con cuántos jonrones cerrará Hernández el 2022?

MÉXICO

Con muy buen pie

El mexicano de los Cachorros, Javier Assad, tenía pautado hacer esta noche ante los Rojos su tercera apertura de la temporada y cuarta presentación de su carrera. Hasta ahora, en 10 entradas de labor, ha permitido apenas una rayita, y junto a Manny Bañuelos son los únicos pitchers nacidos en México que han permitido una rayita o menos en sus tres primeros juegos (mínimo 10 innings) en las Grandes Ligas. Lo hecho hasta ahora no es sino una continuación de lo que venía haciendo Assad en las menores: sumando sus actuaciones entre Doble-A, Triple-A y la Gran Carpa, el derecho ha permitido tres o menos carreras en 17 presentaciones seguidas, un dato más impresionante todavía cuando consideramos que en sus dos primeras salidas en las Mayores, se midió a los Cardenales (4.0 IP, 0 C) y los Azulejos (5.0 IP, 0 C). Como apuntó STATS, Inc., Assad se convirtió en el primer pitcher en la era moderna (desde 1901) en hacer aperturas en blanco contra equipos con récord de 10 o más juegos sobre .500 en cada una de sus primeras dos primeras presentaciones en MLB.

PUERTO RICO

Más historia para Yadier

El puertorriqueño Yadier Molina inició en la receptoría el juego del lunes contra los Nacionales, la 2,098va ocasión en la que comienza un juego como receptor, pasando a Carlton Fisk para quedarse en solitario en el segundo lugar de todos los tiempos y solamente por detrás de su compatriota, y miembro del Salón de la Fama, Iván Rodríguez (2,346 juegos abiertos como careta). El célebre Nro. 4 de los Cardenales ya es dueño del récord de más outs en la historia (15,033, por 14,864 de Pudge) y todavía pareciera tener tiempo para destronarlo en el departamento de chances, donde Rodríguez es líder de todos los tiempos con 16,233 y Yadier le acecha con 16,171 a falta de 26 juegos por disputarse en la ronda regular. ¿Otro récord en la mira de Yadier? Uno que se ha forjado con su gran llave, el derecho Adam Wainwright. Yadi y “Waino” han iniciado 323 encuentros como compañeros de batería, a sólo una apertura del registro de todos los tiempos, los 324 cotejos en los que trabajaron juntos Mickey Lolich y Bill Freehan de los Tigres (1963 a 1975).