En el Día de la Independencia de los Estados Unidos, los fuegos artificiales en la Florida estuvieron en las bases.

El filial de los Marlins en la Florida Complex League, nivel de novatos, se robó una impresionante cantidad de 13 bases durante el triunfo 7-3 el jueves sobre su similar de los Mets en el Roger Dean Stadium.

Ocho jugadores sumaron al menos un robo, mientras que los jóvenes de 19 años, el dominicano José Monserrate y Toby Simmons, encabezaron el grupo con tres cada uno, mientras que el venezolano Andrés Valor (prospecto número 16 de los Marlins) añadió dos.

¿Qué tan raro es esto? Comencemos con el historial en Grandes Ligas. En los anales de las Ligas Americana y Nacional, ha habido dos instancias en las que un conjunto se roba al menos 13 bases en un juego – ambas fueron hace más de 100 años.

En septiembre de 1911, los Highlanders de Nueva York – conocidos ahora como los Yankees – se robaron 15 bases en el triunfo por 18-12 sobre los Carmelitas de San Luis (ahora los Orioles de Baltimore).

Y en junio de 1907, los Nacionales de Washington – que eventualmente se convirtieron en los Senadores de Washington y finalmente los Mellizos de Minnesota, y no en los actuales Nacionales – se estafaron 13 almohadillas en una victoria por 16-5 sobre los Highlanders. La mayor cantidad de robos de base en un mismo partido este año la tienen los Medias Rojas, que sumaron nueve ante los Yankees el 16 de junio.

Es un poco menos inusual en las menores, pero no tanto. En las últimas 20 campañas, ha habido una sola instancia en la que un club se robó 13 bases o más antes del choque del jueves. El 9 de julio del 2009, el conjunto de los Rockies, de la Liga de Verano Dominicana nivel de novatos, sumó 13 estafadas.