El dúo venezolano Díaz-Arráez aportó el bateo necesario para la L.N.
SEATTLE – Aunque Julio Rodríguez fue el favorito de la afición local de Seattle para la Semana de Estrellas de MLB en el T-Mobile Park, el jardinero dominicano de los Marineros no fue, a fin de cuentas, el mayor protagonista del mismo Juego de Estrellas el martes por la noche.
Ese honor le perteneció al venezolano Elías Díaz y, en menor grado, su compatriota Luis Arráez.
Díaz, el único representante de los Rockies en este Clásico de Media Temporada, dio el jonrón decisivo en la octava entrada frente al relevista dominicano de los Orioles, Félix Bautista, para darle al Viejo Circuito su primer triunfo en el evento desde el 2012. Y con dicho cuadrangular de dos carreras, se ameritó el premio a Jugador Más Valioso del partido.
“Muchas emociones”, dijo Díaz. “Mucha emoción de saber que había volteado el partido y que podía ser el MVP del equipo. Algo grande para mi carrera, porque he luchado mucho para poder estar aquí”.
Efectivamente, Díaz, en su novena temporada como receptor de Grandes Ligas, está teniendo lo que podría ser su mejor año en la Gran Carpa, con línea de .277/.328/.435, nueve vuelacercas y 45 empujadas por Colorado en el 2023. Con eso, fue convocado a su primer Juego de Estrellas a los 32 años.
Como bateador emergente con el juego 2-1 a favor de la Liga Americana en ese octavo inning, Díaz vio una recta de los dedos separados (splitter) de Bautista, cerrador de los Orioles, y dio un batazo de 93.3 millas por hora que recorrió 360 y voló la cerca del jardín izquierdo. Gracias al bombazo de Díaz, la Liga Nacional rompió su sequía de 11 años sin conquistar un Clásico de Media Temporada.
“Es fantástico”, dijo el dirigente de la Liga Nacional, Rob Thomson, manager de los Filis de Filadelfia. “Hablé con (el piloto de los Rockies) Bud Black sobre Elías y él me dijo, ‘Ésta es una de las mejores personas que encontrarás. Es un jugador del equipo’”.
Por otro lado, Arráez, quien ya lleva de 4-3 en sus dos Juegos de Estrellas y está en medio de una temporada que podría ser histórica al llevar promedio de .383 con los Marlins, dio dos sencillos en dos turnos el martes, empujando la otra carrera de la Nacional. De esa manera, Venezuela fue el país responsable de producir las tres anotaciones del equipo ganador.
“Esto es divertido. Estoy viviendo un sueño ahora mismo”, dijo Arráez.
De Arráez se podía esperar el heroísmo ofensivo en este evento. De Díaz… no tanto. Y para el oriundo de Maracaibo, lo hizo más gratificante todavía el hecho de contar con la presencia su mamá, Ana Isabel Soto, en el estadio.
“Es lo más especial del mundo para mí, que ella, después de tanto sacrificio que hemos pasado, esté presente para un momento así”, comentó Díaz al salírsele las lágrimas.