EE.UU. y Cuba se lo juegan todo, nada más y nada menos que en Miami
MIAMI – Menos de 24 horas después de su emocionante victoria sobre Venezuela en los cuartos de final del Clásico Mundial de Béisbol el sábado, los Estados Unidos volverán a la carga el domingo por la noche en la primera semifinal del torneo a las 7 p.m. ET contra Cuba.
Será la primera vez en la historia del Clásico Mundial que ambos países se enfrentan.
Con el veterano Adam Wainwright subiéndose al montículo para abrir dicho partido, EE.UU.—el campeón defensor del evento—tratará de llegar a la gran final del próximo martes en el loanDepot park.
En su debut en Clásicos Mundiales el 11 de marzo, Wainwright se adjudicó la victoria con 4.0 entradas de cinco hits y una sola carrera frente a Gran Bretaña en el Grupo C de Phoenix.
De hecho, la selección de estelares de los Estados Unidos ha perdido una sola vez en este torneo, frente a México el día 12 en el Chase Field. Ahora, con todos los juegos de vida o muerte, los estadounidenses están a un paso de la gran final.
En ese tenor, el manager de EE.UU., Mark DeRosa, reveló que la superestrella de los Dodgers, Mookie Betts, se reunió con él y le pidió que dirigiera como si estuvieran en la Serie Mundial.
“Eso me dice que estos muchachos están completamente comprometidos con esto”, dijo DeRosa. “Tienes que igualar la energía en el edificio o te van a ganar”.
El campeón defensor de este evento estará jugando en días consecutivos, habiendo usado a seis relevistas para navegar las últimas cinco entradas de su triunfo sobre Venezuela el sábado en los cuartos de final. Asegura DeRosa que para el domingo, él y su cuerpo de coaches “podrán cubrirlo” con lo que tienen disponible, que sigue siendo un profundo cuerpo monticular entre abridores y relevistas de Grandes Ligas.
CUBA LISTO PARA REANUDAR SU BUEN RITMO
Tras llegar a la Florida desde Asia esta semana, la selección cubana tuvo unos días para reajustarse al hemisferio occidental y realizar algunas prácticas. Para Cuba, este Clásico Mundial ha sido una montaña rusa de emociones. Tras perder sus primeros dos choques en el Grupo A en China Taipéi ante Países Bajos e Italia, la tropa del manager Armando Johnson ganó sus últimos dos choques de la primera fase con marcador global de 20-5 frente a China Taipéi y Panamá, ganando dicha llave por los cálculos de carreras permitidas por outs realizados a la defensa.
Luego, el miércoles, los cubanos vencieron a Australia en Japón en los cuartos de final de vida o muerte para ganarse el derecho de disputar la primera semifinal en Miami. Con una mezcla de jugadores que pertenecen al béisbol de la isla y compatriotas que han jugado en Grandes Ligas--algunos de la talla de Luis Robert Jr., Yoán Moncada y Yoenis Céspedes--Cuba ha llegado a semifinales por vez primera desde el 2006, cuando perdió en la gran final vs. Japón.
Para el partido contra los Estados Unidos, irá por los cubanos en el montículo Roenis Elías, un veterano de partes de siete temporadas de Grandes Ligas. En dos presentaciones (una apertura) en este torneo, el zurdo ha permitido cuatro hits y dos carreras (efectividad de 2.57).
Después de un viaje tan largo y varios días sin actividad de juego, ¿cómo se verá impactada la tropa de Johnson?
“Creo que los días sin jugar no nos van a afectar”, dijo el toletero veterano Alfredo Despaigne, quien batea .412/.389/.588 en cuatro partidos de este Clásico. “Estamos haciendo los ajustes. Somos guerreros y vamos a luchar”.
Otro factor a tomar en cuenta es la situación política. Siendo esta selección una representación directa del país—y jugando frente a nada más y nada menos frente a los Estados Unidos--se espera un ambiente dividido entre cubanos residentes en Miami que apoyarán al equipo y los que aprovecharían el evento para realizar una especie de protesta al estar en contra. Para los jugadores, lo principal es jugar béisbol.
“Pienso que no debe de afectar en nada”, dijo Despaigne al ponérsele el tema. “Lo fundamental de nosotros es el béisbol. Después de las dos líneas para atrás, no nos interesa nada, sólo concentrarnos en el juego.
Agregó el piloto Johnson: “Los atletas están concentrados en lo que en realidad deben hacer, que es el béisbol. Están bien enfocados en eso y creo que van a darlo todo para que ese público que viene en contra también disfrute de un buen partido”.