¿Dos HR hacia la banda opuesta? Soto alcanza su mejor forma
SAN FRANCISCO – No importa si está en las alturas o al nivel del mar, el dominicano Juan José Soto suele destrozar pelotas con sus batazos.
El estelar patrullero de los Padres continuó demostrando que está encontrando su mejor forma con el que fue su 13er juego de por vida con al menos dos jonrones, en la derrota de San Diego por 7-4 el lunes en 10 entradas ante los Gigantes en el Oracle Park.
En el primer duelo entre Padres y Gigantes desde la potente serie de dos partidos que disputaron en la Ciudad de México, Soto no perdió tiempo para poner a su equipo arriba con un bambinazo solitario por la pradera izquierda en el primer episodio.
El segundo cañonazo de Soto ocurrió en la quinta entrada y aterrizó prácticamente en el mismo lugar del anterior, siendo la segunda vez en su carrera que conecta dos cuadrangulares por la banda contraria en un mismo partido.
“Es lo que hace”, expresó el manager de los Padres, Bob Melvin. “Creo que se está sintiendo bien ahora mismo, conectado la bola por la banda contraria. Es lo que él y nosotros veníamos esperando por un tiempo”.
Cuando Soto está en un buen ritmo, conecta la bola en todas las direcciones. Su par de bambinazos por el jardín izquierdo del lunes sirvieron para que aumentara a 44 su total de vuelacercas de ese estilo – seis más que cualquier otro bateador zurdo desde el 2018.
Soto ha lucido más la forma que nos tiene acostumbrados últimamente, y el poder que exhibió hacia su banda opuesta es una prueba de ello. Tiene tres jonrones por el bosque izquierdo en el año, pero no dio su primero sino hasta el 14 de junio.
“Es todo el trabajo que he estado haciendo”, dijo. “Está dando resultados”.
Dado su relativo lento comienzo de campaña, el quisqueyano entiende cómo la frustración en un aspecto del juego se puede traducir en otros sentidos, convirtiéndose en una especie de bola de nieve. Pero estar consciente de ello no es tan fácil.
“Cuando te va bien, no piensas en eso. Sólo sales a hacer swing”, mencionó Soto. “Pero cuando te va mal, eso se mete en tu mente. Incluso cuando no quieres pensar en eso, siempre está ahí”.