Diez leyendas “anónimas” de la última década

27 de diciembre de 2019

Hay jugadores que, a pesar de no haber alcanzado nunca el estatus de estrellas, ni nada que se le parezca, vivirán siempre en la memoria de los fanáticos del béisbol. Aquí están entonces 10 peloteros que, sin haber brillado mucho, protagonizaron momentos en esta década que no vamos a olvidar. (Los jugadores están listados por orden cronológico inverso).

Tony Wolters, C, Rockies del 2018

¿Acabó Wolters con lo que pudo ser la dinastía de los Cachorros? ¡Quizás! El receptor suplente de los Rockies – que tiene un OPS de por vida de .651 a pesar de jugar en Coors Field— entró al Juego del Comodín de la Liga Nacional del 2018 como parte de un doble cambio con la pizarra 1-1 en la baja del 12do y, con dos outs en la alta del 13ro, pegó un sencillo impulsor para traer lo que a la postre sería la carrera del gane. Los Cachorros no han regresado a la postemporada.

Scooter Gennett, 2B, Rojos del 2017

Cinco días antes del Día Inaugural del 2017, los Rojos tomaron a Gennett en waivers. El Día Inaugural ganó el juego con un jonrón de oro de dos carreras. Y el 6 de junio tuvo el día de su vida, convirtiéndose en el primer pelotero de los Rojos en dar cuatro jonrones en un juego, y sumando un récord para el equipo de 17 bases alcanzadas ante los Cardenales. Fue al Juego de Estrellas del 2018 y luego, tan rápido como llegó, se desapareció. Fue cambiado por los Rojos en el 2019 y dejado libre por los Gigantes un mes después. Toda una estrella fugaz.

Mike Montgomery, LZ, Cachorros del 2016

Con el cubano Aroldis Chapman agotado, Montgomery fue llamado para sentenciar a los Indios después de que los Cachorros anotaran dos carreras en la parte alta del 10mo inning del Juego 7 de la Serie Mundial del 2016. No fue fácil: Carl Edwards Jr. ya había permitido un jonrón y dejado un corredor a bordo cuando entró Montgomery, pero el zurdo sólo tuvo que tirar dos pitcheos. Ante el segundo el dominicano Michael Martínez dio un rodado a Kris Bryant, los Cachorros ganaron su primera Serie Mundial desde 1908 y Montgomery tuvo su momento de gloria.

Christian Colón, INF, Reales del 2015

El puertorriqueño, que había anotado la carrera del gane en el Juego del Comodín de la Liga Americana en el 2014, tuvo sólo 119 visitas al plato en el 2015, y ninguno en la Serie Mundial hasta que entró como bateador emergente en la parte alta del 12do inning en el Juego 5 de la Serie Mundial. Después de dar un sencillo, acabaría anotando la carrera ganadora contra los Mets.

Chris Heston, LD, Gigantes del 2015

Al margen de la temporada del 2015, Heston hizo sólo dos aperturas en su carrera. Pero el 9 de junio del 2015, en el Citi Field, completó una de sus 31 aperturas de aquella campaña con un juego sin hit ni carreras. Heston, que lideró a las Mayores ese año en golpeados, perdió su lugar en la rotación y hasta fue bajado a las menores en septiembre. Desde entonces ha lanzado sólo en otros 10 juegos de Grandes Ligas, pero al parecer está intentando volver.

Travis Ishikawa, OF, Gigantes del 2014

Quizás nunca sabremos o entendamos por qué Mike Matheny, el manager de los Cardenales, trajo a Michael Wacha, que no había lanzado en toda la postemporada, con el juego empatado en el cierre del noveno y su equipo al borde de la eliminación en el Juego 5 de la Serie de Campeonato de la LN del 2014 contra los Gigantes. Pero después de que Wacha permitiera un sencillo y diera un boleto, Ishikawa pegó un jonrón de tres carreras para mandar a los Gigantes a su tercera Serie Mundial en cinco años.

Pete Kozma, SS, Cardenales del 2012

El torpedero de los Cardenales era lo más lejano a un gran bateador. Pero su doble de la novena entrada contra Drew Storen coronó la impresionante remontada de los Cardenales en el Juego 5 de la SDLN del 2012 contra los Nacionales.

Aaron Hill, 2B, D-backs del 2012

Hill lideró a las Mayores en viajes al plato en el 2009, el año en que fue a su único Juego de Estrellas, con Toronto, y tuvo una carrera de 13 años en las Grandes Ligas que incluyó un jonrón para los D-backs en la SDLN del 2011 ante los Cerveceros. Pero durante un lapso de 11 días en el 2012, hizo algo que nadie había hecho dese 1931: batear dos veces para el ciclo en un mes. El primero fue el 18 de junio contra los Marineros y el segundo el 29 de junio ante los Cerveceros.

Philip Humber, LD, Medias Blancas del 2012

Humber fue tomado en el tercer puesto global del Draft del 2003 por los Mets y fue pieza clave del cambio que llevó al venezolano Johan Santana a Nueva York, pero no había cumplido con lo esperado y sólo había abierto 30 juegos cuando tomó la loma en Seattle el 21 de abril del 2012. Y jamás había lanzado un juego completo. Pero ese día estuvo perfecto, lanzando 96 pitcheos (ninguno pasó de 92 mph). Humber haría sólo otras 20 aperturas el resto de su carrera, y tras la temporada del 2013, año en el que dejó récord de 0-8 con 7.90 de efectividad para los Astros, quedaría fuera del béisbol.

Dan Johnson, 1B, Rays del 2011

Johnson, que ganó el premio JMV en ambas ligas Triple-A (2004 en la de la Costa del Pacífico y 2010 en la Liga Internacional), será recordado siempre por otra cosa, especialmente por los seguidores de los Medias Rojas: vivirá en el recuerdo como el tipo que dio un jonrón con dos outs y dos strikes para empatar el juego ante los Yankees en el último juego de la temporada del 2011. (La silla donde pegó la bola todavía se conoce como “La silla de Dan Johnson” en Tropicana Field). Evan Longoria terminaría ganando el juego en extrainning y eliminando a Boston. Por increíble que suena, Johnson todavía anda dando vueltas por las menores como nudillista.