FILADELFIA – Los D-backs perdieron su invicto en la postemporada de manera abrupta el lunes, cayendo por 5-3 ante unos Filis que tronaron desde el inicio, con una histórica primera entrada ante el mejor lanzador de Arizona, Zac Gallen.

“Lo emboscaron”, señaló el manager de los D-backs Torrey Lovullo refiriéndose a los dos tres jonrones que permitió Gallen en las primeras dos entradas. “Creo que salieron listos para saltarle a su recta. No es ningún misterio que Zac llena la zona. Tiene una bola rápida agresiva y una mentalidad agresiva. Simplemente lo contragolpearon”.

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Sin embargo, por contradictorio que parezca, el resultado final le otorga una buena sensación al equipo. Teniendo en cuenta la manera en la que inició el compromiso, hubiese sido fácil pensar que el Juego 1 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional terminaría con una paliza a favor de los locales.

Pero Arizona luchó. Contuvo a la potente toletería de Filadelfia y fueron descontando de a poco, gracias en parte a un cuadrangular del dominicano Geraldo Perdomo en el sexto capítulo. Incluso llegaron a poner en el plato la potencial carrera del empate en el séptimo tramo, cuando el bullpen de los Filis se compuso y terminó de asegurar el triunfo.

Pero esa capacidad de reacción deja un buen sabor de boca en el equipo, de cara al segundo choque del martes.

“Por supuesto", respondió Lovullo cuando se le preguntó si el club podría continuar el buen momento el martes. “Sentí al clubhouse comprometido. Estábamos esperando ese pequeño empujón, y Geldy pegó ese jonrón de dos carreras que nos metió de nuevo en esto. Esa es una de las grandes cualidades de nuestro equipo. Competimos. Competimos siempre".

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Sencillamente el lunes no fue el mejor día para los D-backs. No sólo su as de rotación falló, sino que el receptor venezolano Gabriel Moreno, uno de los mejores caretas defensivos del béisbol – especialmente a la hora de hacer disparos certeros y de bloquear pitcheos – cometió un error de tiro y se le escapó un wild pitch que en otro momento hubiese capturado.

Si algo ha caracterizado a los D-backs en el 2023 es su capacidad de recuperarse de momentos complicados, incluyendo el bache que tuvieron a mediados del mes de agosto que los hizo caer dos juegos por debajo de .500. En esta ocasión se trata de un solo partido. De poder ganar uno de los dos encuentros iniciales en Filadelfia, Arizona se sentirá bien regresando a casa con la serie igualada para los próximos tres compromisos.

Pero todo eso será posible si logran pasar la página rápido y continuar con esa tendencia de equipo resiliente que tanto demostraron en la temporada regular, antes de prender los motores para barrer a los Cerveceros y a los Dodgers en la Serie del Comodín y SDLN, respectivamente.

“Creo que no vieron la mejor versión de los Diamondbacks de Arizona hoy”, dijo Lovullo. “Necesitamos reagruparnos y venir mañana a exhibir nuestro mejor juego. Tenemos que estar listos, y lo estaremos”.