ATLANTA – Aunque los Bravos ganaron la Serie Mundial el año pasado sin el venezolano Ronald Acuña Jr., su ausencia ha sido notable ahora que los vigentes campeones han sufrido distintos tropezones durante las primeras dos semanas de la temporada.

Los Bravos, que perdieron el domingo ante los Marlins por 5-4, no han ganado ninguna de sus primeras cinco series. Si bien es demasiado temprano para entrar en pánico, no es demasiado temprano para pensar en cómo Acuña podría cambiarle la trayectoria de esta campaña al equipo.

“Sería un gran empujón para nosotros”, dijo el manager de los Bravos, Brian Snitker. “Cuando regrese, nuestro lineup tendrá más profundidad y podremos poner a algunos de los muchachos en mejores lugares. Con suerte, la rehabilitación continuará yendo bien, lo tendremos de vuelta y quién sabe qué puede pasar”.

“Siempre nos toma las primeras tres o cuatro semanas para asentarnos”, dijo el campocorto de los Bravos, Dansby Swanson. “Una vez que eso pase, vamos a ir con todo”.

Los Bravos no prendieron los motores el año pasado hasta agosto. Acuña se rompió el ligamento de la rodilla izquierda el 10 de julio y el roster fue reconstruido con la adición de cuatro patrulleros durante las siguientes semanas. Si los Mets demuestran que este año que vienen en serio, puede que para los Bravos no sea suficiente intercalar victorias y derrotas en los próximos meses.

Con esto en mente, quizás Acuña debería ser traído de vuelta antes del 6 de mayo, la fecha pautada originalmente para su regreso. Snitker dijo que esa fecha no está escrita en piedra, así que hay razones para pensar en si el talentoso jardinero podría volver el 2 de mayo para el inicio de la serie de cuatro partidos ante los punteros Mets.

“Anda haciendo de todo, trabajando duro y disfrutando”, comentó Snitker. “Esta semana será grande, porque creo que tiene pautado jugar muchos innings a la defensa en como tres o cuatro juegos. Pienso que al final de la semana, vamos a tener una buena idea de cómo está su cuerpo”.

Acuña tiene de 14-5 con un doble y tres bases robadas en tres juegos de rehabilitación con Triple-A Gwinnett. Ha fungido como bateador designado en dos de esos encuentros y jugado como jardinero derecho en tres de los otros. No ha disputado más de seis episodios a la defensa en un partido todavía. Pero lo pondrán a prueba ahora que tiene pautado jugar más entradas una vez que Gwinnett regrese a la acción la noche del martes en casa contra Norfolk.

“Para Ronald, será algo grandioso regresar”, dijo el tercera base Austin Riley. “Y definitivamente, vamos a estar felices al verlo de vuelta”.

Acuña ciertamente va a ayudar a lo que ha sido una deficiente defensa en los jardines. Se espera que juegue en el bosque derecho, mientras que Adam Duvall se mantendría en el central y el puertorriqueño Eddie Rosario como el principal jardinero izquierdo. El dominicano Marcell Ozuna continuará siendo el bateador designado la mayoría de los días. Rosario no es un gran patrullero, pero es mejor defensivamente que Ozuna, Alex Dickerson y el venezolano Orlando Arcia, un torpedero que ha estado dispuesto a pasar algo de tiempo en los jardines.

Ofensivamente, Acuña no estará buscando una temporada 40-40. Pero su presencia en el primer puesto de la alineación lo pondrá directamente delante de Matt Olson, Riley, Ozuna y Ozzie Albies, a quien tradicionalmente le ha ido mejor lejos del tope del lineup. Olson es cuarto en la Nacional con un OPS de 1.042, mientras que Riley es séptimo con .984. Albies está empatado en el liderato de jonrones de MLB con seis y Ozuna encabeza a las Mayores con 32 batazos conectados a 95 millas por hora o más.

“Todo está bien”, comentó Snitker. “Pero tenemos que ganar juegos ahora y hasta el día que él llegue aquí”.