Una defensa cuestionable de Mets le abrió las puertas al trueno de L.A.

4:40 AM UTC

LOS ÁNGELES – Cuando te estás enfrentando a una alineación que cuenta con nombres como Shohei Ohtani, Mookie Betts, Freddie Freeman, el encendidísimo Max Muncy y el especialista en postemporada Enrique “Kike” Hernández, regalarle outs no es lo más recomendable. Ése fue el caso de los Mets el miércoles en el Juego 3 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en el Citi Field, donde aprovechó Los Ángeles para irse arriba 2-0 en el segundo acto con dos anotaciones inmerecidas, rumbo a una aplastante victoria por 8-0 para tomar una ventaja de 2-1 en la serie al mejor de siete.

En el segundo episodio, una decisión cuestionable del receptor de Nueva York, el venezolano Francisco Álvarez, de tirar a segunda ante un rodado corto resultó en un error. Y una jugada que no pudo completar el abridor de los Mets, el dominicano Luis Severino, también contribuyó a que los Dodgers tomaran una ventaja de 2-0 sin darle muy fuerte a la bola en ese inning.

“Cuando estás dándole outs extras a un equipo como éste, bases extras, te van a hacer pagar”, dijo el manager de los Mets, el venezolano Carlos Mendoza.

Una vez salió Severino del partido tras 4.2 entradas, los cañones de los Dodgers castigaron a Reed Garrett (jonrón de dos carreras del puertorriqueño Hernández) y a Tylor Megill (enormes bambinazos de Ohtani y Muncy).

“Ellos saben sacar la bola”, dijo Mendoza. “Se embasan, pero tenemos que continuar al ataque y ejecutar nuestros pitcheos”.

A nivel ofensivo, fue la segunda vez en tres partidos que los Mets han sido blanqueados, ya que perdieron el primer encuentro de esta serie 9-0 en Los Ángeles hace tres días.

Hubo momentos en que los Mets pudieron haber anotado. En el segundo capítulo, el boricua Francisco Lindor, uno de los grandes héroes de Nueva York en las últimas tres semanas, se ponchó ante el abridor Walker Buehler con las bases llenas y dos outs. Y hubo varios batazos fuertes, específicamente de Lindor y del tercera base Mark Vientos, que parecieron ser cuadrangulares evitados por las fuertes brisas en Queens el miércoles.

“Eso no es nada nuevo para nosotros”, expresó Mendoza de esos batazos que en un clima veraniego, probablemente hubieran volado la cerca. “Continuaremos dándole duro a la bola”.

Para el cuarto juego de esta serie el jueves, los Mets – tratando de evitar caer en un hoyo de 3-1 en esta serie al mejor de siete -- se irán con el zurdo colombiano José Quintana en la lomita, contra Yoshinobu Yamamoto de los Dodgers.

“Nosotros hemos tenido muchos obstáculos durante toda la temporada”, dijo Mendoza. “No importa la adversidad, nosotros siempre buscamos la manera de mantenernos positivos, de mantenernos calmados, de mantener la mentalidad de un día a la vez, de enfocarnos en la preparación, de enfocarnos en las cosas que nosotros podemos controlar, sin importar la bulla que hay fuera del equipo”.