Campaña de jóvenes Guardianes concluyó con una dolorosa derrota
CLEVELAND -- Tanner Bibee no pudo contener las lágrimas. Varios de sus compañeros de equipo se sentaron cerca en círculo en el piso de una esquina de un camerino en silencio sepulcral, casi con miedo a moverse. Hubo extensos abrazos, murmullos sinceros.
Esta no era la forma en que debió terminar para los Guardianes.
La sorprendente campaña llegó a un repentino final en altas horas de la noche del sábado, con una derrota 5-2 en diez episodios ante los Yankees de Nueva York en un quinto juego de la Serie de Campeonato de la Liga Americana que pareció tener un poco de todo.
Los Guardianes, que excedieron las expectativas al ganar 92 juegos en la temporada regular, el título de la división Central de la Liga Americana, y batallar para superar a su rival de división Detroit en la serie divisional -- venciendo a Tarik Skubal, el favorito por el premio Cy Young, en el juego decisivo -- para toparse con los Yankees y su nómina plagada de estrellas que supera los 300 millones de dólares.
“Ellos son simplemente mejor equipo”, dijo el jardinero izquierdo de los Guardianes Steven Kwan. “Porque estuvimos cerca en todos esos juegos, creo que eso es lo que hace que esto nos aflija un poco más. Sí, fue un gran año. Es un poco difícil mirar hacia atrás ahora mismo. Es muy fresco. Duele mucho ahora mismo”.
La historia demuestra que los Yankees ganaron en cinco juegos, pero la serie fue más apretada que eso y podría haberse decantado por Cleveland.
La sequía de títulos de Serie Mundial de la franquicia -- que se remonta a 1948 -- envejeció un año más.
Cleveland dejó 47 hombres en las bases, terminando 47-9 (.191) con corredores en posición anotadora. Habrá turnos que los atormentarán durante todo el invierno.
Toda la temporada, su estilo agresivo -- “Guards Ball” como se dio a conocer -- bajo el mando del mánager novato Stephen Vogt rara vez se reflejó ante los Yankees, que usaron sus enormes bates para superarlos. Nueva York sonó dos jonrones en el quinto duelo, mientras que Cleveland apenas consiguió un par de sencillos remolcadores de carrera.
Pero el mayor fracaso por lejos fue el alardeado bullpen de Cleveland, que fue el mejor del béisbol entre abril hasta septiembre, pero no estuvo ni cerca en octubre.
El estelar cerrador dominicano Emmanuel Clase botó el tercer juego, pero fue rescatado y luego se desmoronó en el cuarto al permitir dos carreras en el noveno capítulo.
Clase recompuso en el quinto, pero esta vez fue Hunter Gaddis quien permitió el jonrón de tres de Juan Soto en la décima entrada, con los Yankees poniendo fin a la temporada de Cleveland en los playoffs por segunda vez en tres años.
Poco después de la celebración de los Yankees en el estadio de los Guardianes, Vogt, el laborioso receptor que fue contratado por Cleveland en diciembre pese a no tener experiencia dirigiendo, le dijo a sus jugadores que mantengan la frente en alto.
Su mensaje fue simple.
“Recuerden este sentimiento”, les dijo. “Recuerden esto que sienten ahora mismo porque hay más en la mesa para este grupo. Sabemos que podemos alcanzar más, pero siéntanse orgullosos de lo que conseguimos en general y aprovecharlo como inspiración en el invierno".