PHOENIX – El receptor principal de los Diamondbacks, el venezolano Gabriel Moreno, fue activado de la lista de lesionados el domingo, pero no estuvo en la alineación titular. Eso tiene su explicación, ya que el abridor de Arizona para finalizar su serie contra Milwaukee, Zac Gallen, tiene cierta preferencia de tirarle a otro careta venezolano del equipo, José Herrera.

Hay un tercer cátcher que ha dado de qué hablar en los Diamondbacks, el miamense de ascendencia cubana y puertorriqueña, Adrián del Castillo. Aunque su defensa no es tan pulida como la de Herrera y sobre todo Moreno, Del Castillo ha bateado .313/.368/.525 (OPS de .893) con OPS+ de 146 en 25 partidos con el equipo grande de Arizona.

Ahora mismo, los Diamondbacks tienen a tres receptores en su roster expandido de septiembre. Eso podría cambiar cuando sea activado de la lista de lesionados en algún momento el jardinero cubano Lourdes Gurriel Jr. Entonces, la interrogante es cuál de los dos, entre Del Castillo y Herrera, podría seguir con Arizona ahora y en la postemporada, si el club del desierto termina de asegurar uno de los Comodines de la Liga Nacional.

Mientras se espera el desarrollo de ese tema, Del Castillo reflexionó sobre sus aportes en los Diamondbacks, que han incluido 14 empujadas en sus primeros nueve partidos como ligamayorista, siete hits en sus primeros tres juegos y un memorable encuentro en Miami contra los Marlins, en el que conectó un jonrón con bases llenas ante sus familiares y amigos.

“Ha sido divertido. Obviamente, quieres ganar los juegos cuando estoy arriba”, dijo Del Castillo, de 24 años de edad. “Es un poco estresante, pero es mejor estar arriba en un equipo que está jugando bien que en uno que no esté jugando bien”.

Un tema a seguir, por supuesto, es la defensa de un cátcher novato. Además de aprender cómo trabaja cada lanzador de un equipo, las habilidades técnicas tienen mucho escrutinio en el mayor nivel del béisbol, sobre todo con los Diamondbacks luchando los playoffs. Hasta el domingo, él y Herrera habían permitido que 40 de los últimos 45 corredores que habían intentado robar bases llegaran quietos a las almohadillas, lo contrario de Moreno como careta defensivo.

“No es nada fácil”, dijo el manager de los Diamondbacks, Torey Lovullo, sobre el desarrollo de Del Castillo en cuanto a la defensa se refiere. “Cuando llegas aquí, es un aprendizaje fortísimo. No me importa dónde hayas estado, dónde hayas aprendido. Esa experiencia directa es invaluable. Él lo ha manejado bien”.

Con el instructor de los cátchers de Arizona, Jeff Banister, Del Castillo ha afinado algo su juego detrás del plato. Pero sin duda, es una obra en progreso.

“Ha sido difícil. Obviamente, he tenido que ajustarme a muchas cosas, porque ellos no me conocen y yo no los conozco”, comentó Del Castillo, refiriéndose al trabajo con los serpentineros de los Diamondbacks. “Entonces, ha habido mucha comunicación en el casillero y durante los juegos, en el dugout entre entradas. Estoy tratando de que la transición sea lo más suave posible y que los lanzadores se sientan lo más cómodos posible.

“Obviamente, tengo que mejorar cada día”.

Algo en particular que los receptores deben dominar, en algún momento, es la habilidad de hacer los ajustes durante los partidos en el manejo de los lanzadores, nada fácil para un receptor novato.

“Él sigue el plan de juego al pie de la letra, pero hay momentos en que tienes que improvisar y con el tiempo, al conocer los swings de los bateadores contrarios, los lanzadores y los pitcheos de ellos, él empezará a saber cuándo será el momento de adaptarse e improvisar”, dijo Lovullo. “Pero por ahora, se ha visto muy bien. Asimila las informaciones que le proporcionamos, quiere aprender y es todo lo que queremos que sean los jugadores jóvenes cuando reciben ese primer llamado al equipo grande de los Diamondbacks de Arizona.

“Es un gran estudiante del juego, pero se le tomará algo de tiempo adquirir esa experiencia. Está en camino a eso”.

Agregó Del Castillo: “Las primeras dos, tres semanas arriba fueron un poco abrumadoras. Recientemente, se me ha desacelerado todo. Ahora, he podido respirar y salir a rendir. Al final del día, es el mismo juego que he jugado por mucho tiempo. Ha sido divertido”.

Queda esperar si los Diamondbacks elegirán la ofensiva de Del Castillo o la defensa de alguien de más experiencia, como Herrera, para ser el sustituto de Moreno.

“Tengo que disfrutar esto lo más que se pueda”, manifestó Del Castillo. “No puedo controlar nada que sea salir a rendir y jugar lo más duro que pueda. Que pase lo que tenga que pasar y, diría yo, tomarlo un juego a la vez”.