Miguel Sanó tuvo un inesperado encuentro con las pasarelas del Tropicana Field
Algunos estadios de las Mayores cuentan con extrañas particularidades. Por esa y otras razones, al inicio de cada partido los árbitros actuantes discuten con los dirigentes de los elencos a enfrentarse, las reglas del terreno en cuestión. Uno de estos singulares parques de béisbol es el Tropicana Field, el cuartel general de los Rays de Tampa Bay ubicado en St. Petersburg, al oeste de la península de la Florida.
Este viernes, durante el partido que los Twins de Minnesota les ganaron 5-3 a los Rays en el Tropicana, el antesalista de los visitantes, Miguel Sanó, conectó un alto elevado en la parte alta del octavo episodio que parecía dirigido hacia el área del jardín izquierdo (y quizás un poco más allá), pero... terminó en el guante del campocorto local, Willy Adames, para el tercer out de la entrada.
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La explicación es sencilla: La pelota impactó en una de las pasarelas del Tropicana Field, una serie de anillos que ayudan "subir" el techo cubierto que es translúcido por una fibra de vidrio que es cubierto por teflón, y le provee el origen único de reglas del terreno para el estadio.
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La reacción de Sanó no necesita mucha explicación. Y es que si nunca le había sucedido, la de hoy no lucía como la mejor jornada para semejante casualidad: Sanó se fue de 4-0 con dos ponches ante los envíos de varios lanzadores de los Rays. Aunque su equipo se llevó la victoria.
