SAN LUIS – Del 2005 al 2022, los Cardenales no tuvieron que pensar mucho en la receptoría, con el puertorriqueño Yadier Molina exhibiendo una de las mejores defensas y uno de los mejores manejos del pitcheo en la historia reciente.

Sin embargo, tras el retiro del casi seguro futuro Salón de la Fama, la combinación del venezolano Willson Contreras y Andrew Knizer en el 2023 dejó algo que desear. Este año ha sido un poco mejor, con la de Contreras, el panameño Iván Herrera y el venezolano Pedro Pagés aportando una combinación de ofensiva y defensa que ha mantenido a flote a San Luis en ese sentido.

Tal como lo hizo Herrera al principio de la temporada antes de lesionarse, a Pagés le ha tocado jugar con bastante frecuencia, con Contreras fungiendo como bateador designado para aprovechar su bate. Con apenas 36 juegos de experiencia en Grandes Ligas tras su debut en abril, Pagés ha traído al Busch Stadium su defensa tan elogiada a nivel de liga menor.

“Ha sido sobresaliente”, dijo el dirigente de los Cardenales, Oliver Mármol, sobre lo hecho por Pagés detrás del plato. “Ser joven en este juego es difícil, en cuanto a los ajustes, la mentalidad, la presión y la angustia que vienen con cada partido. Hay mucha presión cuando eres joven, sobre todo ahora con las redes sociales y todos los críticos. Es difícil ser tú mismo y simplemente jugar.

“Luego, agregas el hecho de ser receptor. Con eso, hay otro nivel de expectativas, porque estás controlando cada pitcheo y estás involucrado en cada cosa que pasa”.

Hasta ahora, Pagés no ha puesto los números tan llamativos en Grandes Ligas como los que tuvo en liga menor. Mucho de su fama fue que en las menores, jamás tuvo una campaña completa con menos del 30% de los corredores puestos out en intentos de robo. Ahora mismo, lleva un 23% en ese sentido (31-9) con el equipo grande. Sus métricas avanzadas varían de -1 en Total Zone Fielding Runs por encima del promedio a +3 Carreras Defensivas Salvadas. Se encuentra en el medio de la lista en “framing” (cuadre de strikes) en el percentil 52 y un poco mejor en “pop time” (tiempo de capturar el pitcheo, levantarse y jugar a la base), en el percentil 69. Pero sí, bloqueando los pitcheos por el suelo, tiene 2 por encima del promedio.

Para el joven de 25 años, nacido en Venezuela y mayormente criado en Miami, este inicio es una obra en progreso.

“Es simplemente el hecho de estar aquí arriba”, dijo Pagés. “Mientras más juego tengo, más aprendo de los coaches, los lanzadores. Estar en la misma página con ellos es lo más importante, lo de la comunicación que hace que ellos me tengan la confianza para salir y pedir el juego con ellos. Significa mucho para mí y la defensa es algo con el que tengo mucho orgullo. A seguir trabajando”.

Pagés nunca fue conocido como un gran bateador a nivel de liga menor. Pero llegó al domingo con 12 encuentros consecutivos bateando de hit y el mejor tercer mejor promedio entre los receptores de Grandes Ligas en julio con .314. Eso es un extra para San Luis, que cuenta con Pagés para poder maximizar la ofensiva de Contreras y, al mismo tiempo, limitar el desgaste físico del veterano.

“Se siente bien. Es algo que aquí cuidan mucho, la defensa”, comentó Pagés. “Entonces, simplemente salir a competir todos los días, dando lo mejor de mí defensivamente, detrás del plato. Recibir, sacar de out a los corredores, ayudar a los lanzadores a navegar un juego… salir con la victoria es lo más importante. Es algo que me da mucho orgullo, así que voy a seguir trabajando”.

En medio de la lucha por la postemporada, los Cardenales le están pidiendo mucho a Pagés, egresado de la Florida Atlantic University.

“Número 1, tienes que estar cómodo con quién eres, y número 2, ser bien bueno en esa posición”, expresó Mármol al tocar el tema. “Él ha aprendido muy bien sobre nuestros lanzadores y ha colaborado muy bien con nuestro desarrollo de planes de juego. Hay mucha confianza ahí cuando ponemos de BD a Contreras. Se ha adaptado muy bien”.

Pagés se ha acoplado tan bien que cuando Herrera se recuperó de una lesión en la espalda en la segunda semana de este mes, el istmeño fue enviado a Triple-A Memphis.

“Desde niño, he trabajado mucho en eso”, dijo Pagés sobre su defensa y, sobre todo, su fama de sacar a los corredores con sus cohetazos a segunda. “Es algo que me enorgullece, hacer eso en el menor tiempo posible, ser preciso con los tiros. Y es algo en que hasta hoy en día trabajo bastante”.

La “rotación” de la receptoría es una situación relativamente nueva para los Cardenales, tras tanto tiempo con “El Marciano”.

“Es algo que esta organización no tuvo que hacer mucho en las últimas dos décadas, ¿verdad?”, recordó Mármol, de ascendencia dominicana. “Pero sí en los últimos dos años. Es una transición que requiere de mucho trabajo. Pero creo que los jóvenes y específicamente Pagés lo han manejado muy bien”.