Cinco interrogantes que los Cardenales deben responder en esta temporada baja
SAN LUIS – Con el presidente Bill DeWitt Jr. declarando recientemente que los Cardenales pasarán el próximo año enfocándose en renovar su sistema de desarrollo de jugadores –y casi con seguridad recortando la nómina a nivel de Grandes Ligas– el equipo actualmente tiene más preguntas que respuestas entrando a la temporada baja.
El futuro inmediato de los Cardenales está más nublado que en años, así que vayamos directamente a las cinco preguntas más importantes que enfrenta el club en lo que probablemente será un invierno muy ativo.
¿Quién se queda y quién se va?
Es casi seguro que los Cardenales, que tuvieron marca de 83-79, lucirán dramáticamente diferente al comienzo de los entrenamientos de primavera.
San Luis está decidido a centrar el equipo de 2025 en torno al núcleo joven de Masyn Winn, Brendan Donovan, Lars Nootbaar, Alec Burleson, Jordan Walker, Nolan Gorman, Thomas Saggese, Andre Pallante, Michael McGreevy, Matthew Liberatore y Ryan Fernández.
Eso significa que veteranos establecidos como Nolan Arenado, Sonny Gray, Willson Contreras, Miles Mikolas y Steven Matz, todos programados para ganar más de $10 millones en la próxima temporada, podrían ser cambiados como una forma de recortar la nómina si se ajusta a lo que el Presidente del Operaciones de Béisbol, John Mozeliak, se refirió como un “reinicio”.
Ryan Helsley, quien acaba de lograr un récord del equipo con 49 salvamentos en 53 oportunidades, debe recibir un merecido aumento en el arbitraje y es otro candidato a ser canjeado, considerando la cantidad de prospectos que probablemente se obtendría.
Los Cardenales también tienen opciones del club sobre los lanzadores veteranos Kyle Gibson y Lance Lynn. Paul Goldschmidt, Andrew Kittredge y Keynan Middleton se convertirán en agentes libres, y al club le gustaría tenerlos a todos de regreso, pero la nueva dirección podría no permitirlo.
¿En qué se diferenciarán las cosas si Chaim Bloom espera suceder a Mozeliak?
Mozeliak, el arquitecto de esos equipos de los Cardenales que fueron tan consistentes entre 2011 y 2015, finalizará la extensión de contrato que firmó en febrero de 2022 antes de retirarse. Su trabajo más importante durante los próximos meses probablemente será tratar de maximizar el valor que podrían obtener por los veteranos si los Cardenales decidan transferirlos. Cambiar a un veterano probado como Arenado, Gray, Contreras o Helsley no será un movimiento popular para un club que probablemente no cosechará los beneficios de tal acuerdo hasta dentro de unos años.
Bloom, quien asumirá el cargo de Presidente de Operaciones de Béisbol en 2026, probablemente no quería tener nada que ver con ese trabajo después de seguir vinculado al controvertido cambio de la superestrella Mookie Betts a los Dodgers poco después de asumir el cargo de Jefe de Operaciones de Béisbol de los Medias Rojas en el 2020. El enfoque de Bloom para el 2025 estará en el sistema de desarrollo de jugadores de ligas menores, un área en la que prosperó mientras trabajaba para los Rays de 2005 a 2019. Ha trabajado como asesor de los Cardenales desde enero, y sus huellas digitales estaban en todas las adquisiciones de Kittredge, Fernández y Riley O'Brien por parte del club.
¿Pueden los Cardenales tener un movimiento juvenil y aun así competir por un lugar en los playoffs?
Si San Luis termina canjeando a Arenado o Gray, esas bajas serán especialmente duras y probablemente significarán que el club no tendrá la alineación o la profundidad de lanzadores necesarias para llegar a la postemporada. La reconstrucción puede ser dolorosa y es algo con lo que los fanáticos de los Cardenales no están muy familiarizados. Sin embargo, eso no significa que 2025 tenga que ser una temporada perdida. Los Cardenales todavía tienen suficiente talento joven y dinámico para permanecer en la pelea la mayor parte de la temporada y lograr avances significativos.
Arenado se comprometió con los Cardenales a largo plazo al rechazar una opción de rescisión de su contrato después de la temporada 2022. Mientras tanto, Gray firmó con el club el invierno pasado porque anhelaba jugar para una franquicia que ha sido un contendiente perenne durante décadas. Cambiar uno o ambos indicaría que se avecina una reconstrucción completa de varios años para San Luis.
¿Deberían los Cardenales contratar a Goldschmidt y Kittredge para su liderazgo?
Goldschmidt, futuro miembro del Salón de la Fama de los Cardenales al igual que Arenado, está a punto de convertirse en agente libre sin restricciones por primera vez en su carrera. Nunca ha ganado una Serie Mundial y dijo después del final de la temporada que tener la oportunidad de hacerlo pesaría mucho en su decisión sobre dónde jugar en 2025. Goldschmidt, de 37 años, acaba de atravesar por la peor temporada de su carrera en la MLB, pero cree que aún puede volver a un alto nivel de bateo con algunos ajustes en su swing y su enfoque en el plato.