TORONTO – Al final, los Azulejos no pudieron contener a los Astros, dejando que se desperdiciara una de las mejores labores de la joven carrera del cubano Yariel Rodríguez.

En la eventual derrota por 3-1 de Toronto, el oriundo de Camagüey estuvo más dominante que nunca durante 6.2 entradas de labor de una carrera permitida, pero su equipo sólo conectó cuatro hits para respaldarlo. De allí que esa “P” no pareciera tener lugar al lado de su nombre.

Rodríguez incluso llegó a estar en medio de una labor perfecta luego de 4.2 tramos, antes de que el dominicano Jeremy Péña conectara un bambinazo solitario hacia el jardín derecho.

“Aparte de eso, estuvo fantástico”, expresó el manager de los Azulejos, John Schneider. “Aprovechó lo agresivo que es. Fue su mejor apertura del año, realmente. Su slider estuvo bien, su recta también. Creo que no enfrentó a más de cuatro rivales en un inning. Fue todo lo que le pudimos haber pedido hoy”.

Fue un ejemplo perfecto de lo que pasa cuando el derecho de 27 años combina la intensidad en la loma con el control. El monticular también estuvo eficiente, pasando a rivales de los Astros al colocar la bola donde quería. Lució como un lanzador que no sólo puede abrir juegos en las Mayores, sino brillar haciéndolo.

“Sencillamente salí sin presión, entendiendo que era un día importante para los aficionados [en el Día de Canadá]”, comentó Rodríguez. “Sólo quería salir y dar lo mejor que tengo”.

A pesar de la situación del equipo – récord de 38-46, a ocho juegos del último puesto del Comodín de la Liga Americana – lo hecho por Rodríguez luce bien alentador para el futuro del club, a pesar de lo difícil que es ver hacia el futuro, más allá de la venidera Fecha Límite de Cambios.