Siete ramificaciones del acuerdo de Carlos Correa con los Gigantes
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La siguiente gran firma de la agencia libre ya cayó. El martes por la noche, el puertorriqueño Carlos Correa y los Gigantes de San Francisco llegaron a un acuerdo de 13 años y US$350 millones, según le informó una fuente a Mark Feinsand de MLB.com. Es un contrato impactante, otro más en este invierno y que tendrá muchas ramificaciones en los próximos años.
Aquí, siete conclusiones rápidas del contrato.
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1. Los Gigantes tienen a su estrella. Incluso ganando 107 encuentros hace dos años, ese éxito pareció más un esfuerzo en conjunto que causa de una estrella principal.
Bueno, los Gigantes ahora tienen a la estrella que querían. Correa se convierte de inmediato en la cara de la franquicia, llenando el vacío dejado por Buster Posey, quien se retiró tras el 2021. Además, Correa llega siendo dos años menor y con un pacto de US$13 millones menos del que hubiese devengado Aaron Judge.
Considerando el éxito que ha tenido el club buscando piezas de complemento, tener una estrella como el boricua parecía ser el próximo paso lógico para San Francisco.
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2. El Oeste de la Liga Nacional es una locura. Ya sea ante Este o el Oeste de la Nacional, el Este de la Liga Americana ha perdido el cetro de la división más disputada.
Los Padres se armaron con la firma de Xander Bogaerts (y claro, la adquisición del dominicano Juan José Soto hace cinco meses). Y ahora los Gigantes han pactado con el que muchos consideraban el mejor jugador de la agencia libre. La sorpresa hasta ahora ha sido el silencioso invierno de los Dodgers, que, de cualquier manera, cuentan con una nómina enorme.
3. Los fans de los Dodgers van a tener a quién abuchear durante los próximos 13 años. Creemos que si los Dodgers o los Yankees hubieran firmado a Correa, los seguidores hubiesen dejado de ver al boricua como su enemigo público número uno, luego del escándalo del robo de señas con los Astros en el 2017. Pero, con el puertorriqueño en los Gigantes, vaya…
Abuchear a Correa se volverá una tradición en el Dodger Stadium.
4. ¿Qué pueden hacer los Mellizos ahora? Muy buena pregunta. Minnesota llamó mucho la atención al agregar a Correa el año pasado, y aunque el boricua tuvo una buena campaña, al final fue sólo un año… un 2022 en el que los Mellizos ni siquiera clasificaron para la postemporada. Es posible que Minnesota ahora busque firmar a Dansby Swanson, o posiblemente compensar con pitcheo. O puede que den un paso atrás y reconfiguren todo. Pero algo está claro: Los Mellizos no lucen tan fuertes sin Correa.
5. ¿Será que los Orioles harán algo? ¿Y los Cachorros? Parecía que no había otra franquicia mejor posicionada para causar un impacto en la temporada muerta que Baltimore, que surgió este año con marca positiva tras algunas campañas sin rumbo. Y su GG hasta dijo que serían agresivos este invierno, algo que llenó de anticipación a la fanaticada. Pero hasta ahora respondieron con… Kyle Gibson. A propósito, ¿no se suponía que Chicago iba a buscar a una superestrella también en algún momento? De hecho, tienen un gran hueco en el campo corto y Correa hubiera sido el ideal ahí. ¿Cuándo harán ruido los Orioles?
6. ¿Se convertirá Correa ahora en el consistente JMV que hemos esperado? Obviamente, ha sido un excelente jugador durante su carrera. Pero si recuerdan cuando irrumpió en el 2015, honestamente, algunos se preguntaron si sería un talento con camino al Salón de la Fama. Impresionante a la defensa, un bateador de alto nivel, más una personalidad carismática y simpática. Las lesiones lo han limitado un poco y el escándalo del robo de señas también fue una mancha. Ahora está en el centro de una de las destacadas franquicias en el béisbol, con una afición que cuando admira a alguien lo amará por siempre. Terminó de quinto en las votaciones para JMV este año, su mejor resultado. ¿Podrá ser la superestrella que se mantendrá entre esos primeros cinco?
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7. Los inviernos normales son buenos. Éste invierno ha sido divertido. Con la pandemia y luego el cierre patronal en la temporada muerta pasada, no habíamos visto en un buen tiempo un receso de temporada al rojo vivo. Las Reuniones Invernales fueron explosivas y con bastante movimiento, con jugadores de alto perfil firmando con equipos destacados y las rivalidades encendiéndose… y todavía faltan varios agentes libres por firmar. Qué divertido es esto. Como debe ser.