¿Por qué Oswaldo Cabrera podría ser la clave de los Yankees en octubre?

NUEVA YORK -- El manager de los Yankees, Aaron Boone, llama a Oswaldo Cabrera su malla de seguridad, y con razón.

El venezolano es el jugador todo terreno de Nueva York. Si uno de los regulares no puede jugar debido a una lesión o necesita un día libre, se puede apostar a que Cabrera será el sustituto.

Cabrera ha jugado todas las posiciones esta temporada, excepto el jardín central y la receptoría. Incluso lanzó en un juego, tirando un tercio de inning sin permitir anotaciones contra los Angelinos el 8 de junio.

Cuando comenzó el Spring Training, Cabrera parecía destinado a ser un jugador de la banca, pero para el Día Inaugural, los Yankees lo necesitaban en la tercera base contra los Astros, después de que DJ LeMahieu ingresó a la lista de lesionados debido a una fractura en el pie derecho. Cabrera respondió, bateando de 4-2 con una carrera impulsada contra Houston el 28 de marzo.

Antes de esta temporada, Cabrera nunca había jugado en la primera base. Pero ahí estaba el 31 de agosto, ocupando el lugar de Anthony Rizzo, quien se perdió 2 meses y medio por una fractura en el antebrazo derecho. Se espera que Rizzo se pierda la Serie Divisional de la Liga Americana contra los Reales debido a dos fracturas en los dedos de la mano derecha. No se sorprendan si Cabrera juega en la inicial.

“Me encanta jugar. Esa es la cuestión. No me importa en qué posición juegue”, dijo Cabrera. “Obviamente, queremos a Rizzo en el lineup. ... Todos estamos en la misma página con eso”.

A Boone le gusta cuánto ha mejorado Cabrera contra los lanzadores derechos. Su promedio contra los diestros subió de .215 en 2023 a .268 este año. Existe una gran posibilidad de que Cabrera esté en el lineup abridor contra los Reales el sábado.

“Es un gran compañero de equipo, un verdadero profesional, ama el juego y le encanta prepararse”, contó Boone. “Lo ves trabajar a diario y se asegura de mantenerse a tono agarrando rollings.

“Primera base es algo nuevo para él este año. Ha trabajado mucho ahí, pero se mueve por todas partes. Por un tiempo fue casi nuestro tercera base regular. Ha jugado un poco en el campocorto. Lo ves durante la práctica de bateo, y salta al outfield para asegurarse de tener repeticiones en vivo allá afuera”.

Los elogios de Boone y otros miembros de los Yankees no eran tan frecuentes la temporada pasada. Después de aportar energía y hits en momentos clave durante su año de novato en 2022, Cabrera tuvo problemas en el 2023. De hecho, fue enviado a Triple-A Scranton/Wilkes-Barre tres veces debido a su falta de producción. Su OPS bajó de .741 en su año de novato a .574 la campaña pasada. Cabrera confesó que estaba escuchando demasiadas voces cuando se trataba de su swing.

Cabrera decidió probar un nuevo enfoque este año después de hablar con el coach de bateo James Rowson, quien le dijo que fuera él mismo todos los días. Eso significaba ser agresivo en todo momento. El año pasado, cuando cometía un error, Cabrera pensaba, “es solo béisbol. Todo va a estar bien”, pero no fue el caso.

“Estuve trabajando mucho en mi consistencia [en el plato, esta temporada muerta] y en mis habilidades mentales, tratando de sacar toda la basura de mi cabeza y concentrarme solo en las cosas que puedo controlar”, relató Cabrera. “Por esa razón, todo lo que pueda suceder fuera de mi control, no hay nada que pueda hacer al respecto. [Rowson] es más que un coach de bateo; para mí es alguien que me ayuda mentalmente. Es el tipo de persona que se asegura de que tenga mi mente en el lugar correcto”.

Rowson no es la única persona que le transmite vibras positivas a Cabrera. Todos los días, los padres de Cabrera, Leo y Jitty, le envían mensajes de texto positivos diciéndole: “Estamos muy orgullosos de ti por lo que estás logrando esta temporada”.

“Ellos saben que no fue fácil”, dijo Cabrera sobre sus padres. “Siempre me decían cosas hermosas. Eso me da mucha energía para seguir adelante”.