¡De película! Lindor decide juego dramático para clasificar a Mets

ATLANTA -- Requirió de un día extra, un camino complicado y un poco de sufrimiento, pero los Mets van a la postemporada. Su victoria por 8-7 sobre los Bravos en el Juego 1 de una doble cartelera el lunes les aseguró un puesto de Comodín.

Luego de su derrota en el cierre de la doble cartelera, volarán de regreso a Milwaukee para enfrentar a los Cerveceros, mientras que los Bravos también aseguraron su pase y jugarán contra los Padres. Los Diamondbacks quedaron eliminados con la doble-cartelera dividida en Atlanta.

La victoria fue la número 89 de la temporada para Nueva York, culminando un año que comenzó con cinco derrotas consecutivas y que los vio estar a tres outs de una sexta derrota seguida. Para el 29 de mayo, los Mets tenían 11 juegos por debajo de .500 y parecían destinados a ser vendedores en la Fecha Límite de Cambios.

Pero el equipo se recuperó gracias a fuentes inesperadas, como Grimace, la mascota de McDonald’s que se convirtió en una celebridad en el Citi Field; el infielder cubano José Iglesias, quien impulsó a los Mets con su juego en el terreno y su talento musical fuera del mismo; un bullpen reconstruido; y una nueva actitud. Armados con un mantra de “nada que perder”, los Mets subieron constantemente en la clasificación de junio a septiembre.

Una última adversidad se presentó la semana pasada cuando los últimos dos partidos de una serie en Atlanta fueron pospuestos debido al mal tiempo. Posteriormente, los Mets perdieron dos de tres en Milwaukee, lo que preparó la singular situación del lunes: Ganar un último juego contra sus rivales de siempre para avanzar a los playoffs o ser barridos y quedarse fuera.

Los Mets tomaron la primera ruta, venciendo a los Bravos para asegurar un lugar en la postemporada por apenas la segunda vez desde su participación en la Serie Mundial de 2015. Y lo hicieron de manera dramática, remontando con seis carreras en la octava entrada antes de perder la ventaja cuando el puertorriqueño Edwin Díaz permitió cuatro vueltas en la novena. Sin embargo, los Mets mostraron su resiliencia una vez más, tomando la ventaja definitiva con un jonrón de dos carreras del boricua Francisco Lindor contra Pierce Johnson en la novena entrada.