Alvarado se coloca en los récords con ponches y mucho fuego

Una semana después de haber impuesto una marca de ponches seguidos, el venezolano José Alvarado ha vuelto a dejar huella con sus guillotinas.

El martes en Chicago, el zurdo se llevó el salvado durante el triunfo de los Filis ante los Medias Blancas por 7-4 en el primero de la doble tanda, retirando el noveno por la vía 1-2-3 con dos abanicados. Fue la séptima presentación seguida para Alvarado comenzando la temporada en la que ponchaba a dos o más rivales.

Si siete cotejos de esas características parecen muchos, bueno… es porque efectivamente lo son.

Según la base de datos de Baseball-Reference, Alvarado es el primer relevista corto (presentaciones de menos de 2 innings) que abanica a dos o más contrarios en sus primeros siete juegos de una campaña. Estaba empatado con otros cuatros lanzadores, siendo el cubano Aroldis Chapman el más reciente en hacerlo, durante la temporada del 2021.

Tomando en cuenta también lo hecho al final de la temporada regular 2022, Alvarado llegó a conseguir múltiples “K” en 14 presentaciones sucesivas, una cadena que inició el 13 de septiembre del 2022 y terminó el miércoles en Chicago cuando se llevó su segundo salvado del año, también por la vía rápida, aunque esta vez sin ponchar a nadie. Desde 1901, el único relevista que tuvo una seguidilla de presentaciones de menos de dos episodios con dos o más ponches más larga que la de 14 de Alvarado fue el propio Champan con una de 15 entre septiembre del 2020 y abril del 2021.

Alvarado ya había escrito su nombre en los libros de récords el miércoles de la semana pasada en el Citizens Bank Park, cuando se convirtió en el primer relevista en la era de la expansión (desde 1961) en ponchar a 11 bateadores en fila en una misma campaña. Antes de que apareciera el poderoso zurdo de los Filis, Eric Gagne (2003) y Chad Green (2019) eran los únicos dos que habían ponchado a 10 seguidos.

Fuego y más fuego

El dominio de Alvarado en este arranque del 2023 ha sido simplemente arrollador. En 8.1 entradas trabajadas, ha enfrentado a 29 rivales y ha ponchado a 18, el 62%, la mejor marca en las Grandes Ligas. Ha dado un solo boleto, le han conectado cuatro hits y ha permitido una sola carrera, para una efectividad de 1.08.

Su tasa de ponches de 19.44 por cada 9 innings es la mejor de todo el béisbol entre los serpentineros que vienen desde el bullpen. Para ponerse esa cifra en referencia, consideren que el año pasado el puertorriqueño Edwin Díaz lideró a la Gran Carpa en K/9 con 17.1.

El nativo de Maracaibo está atormentando a los bateadores con una combinación de dos pitcheos, sinker y recta cortada. El primero se aleja de los derechos y lo utiliza el 59.3% de las veces, y un poco más ante los zurdos (69.7%). La recta cortada, o cutter, toma el rumbo contrario. Desde el punto de vista de un toletero diestro, se mueve de afuera hacia adentro, cayendo con más violencia. La usa el 40% de las veces (44.3% vs derechos).

Los pueden ver mejor en la siguiente gráfica de Baseball Savant, donde las líneas de color amarillo son sinkers y las marrón son rectas cortadas:

Y aquí pueden ver mejor dónde coloca cada uno, con la zona más roja representando el sitio donde los lanza con más frecuencia:

Ambos lanzamientos han sido especialmente efectivos este año. En turnos terminados con el sinker, los rivales le batean de 12-2 – incluyendo un jonrón -- y ha sellado cinco ponches. Ante la recta cortada, tienen de 9-1 con un doble y nueve ponches.

Aunque son dos envíos que se mueven, es la combinación de control y rapidez lo que los hace tan efectivos. Su recta cortada aparece de octava en velocidad promedio (93.5 mph) y el sinker es cuarto (99.1 mph). Y un dato curioso: cumplida la jornada del miércoles, el pitcheo más lento que ha tirado Alvarado en el 2023 viajó a 91.4 mph. Es el único pitcher que ha lanzado el 100% de sus envíos a 90 mph o más.

El hombre al que popular “Pitching Ninja” apodó “El Diablo” está lanzando puro fuego. Y ponchando al que se le atreviese en el camino.