Domínguez hará historia en el Futures Game

La era del dominicano Jasson Domínguez comenzó oficialmente cuando entró al cajón de bateo el lunes en la Florida Complex League. Pero muchos aficionados más verán quién de verdad es la promesa Nro. 1 de los Yankees en un futuro muy cercano.

Domínguez, el 24to mejor prospecto de todo el béisbol según MLB Pipeline, jugará en el Juego de las Futuras Estrellas 2021, se ha enterado MLB.com. El encuentro se disputará el domingo 11 de julio en el Coors Field de Denver y será de desde innings, desde la 1 p.m.

Domínguez será el primer jugador en participar en el Juego de las Futuras Estrellas sin haber jugado en una liga de temporada completa y es el más joven en ver acción en dicho compromiso desde que el también dominicano Vladimir Guerrero Jr. lo hiciera a los 18 años en el 2017.

Domínguez, quien acaba de cumplir 18 años, fue uno de los prospectos que hizo más ruido en el mercado internacional en la memoria reciente cuando fue disponible para firmar en el ciclo 2019-2020. Los Yankees le dieron US$5.1 millón para firmarlo el 2 de julio del 2019. Se trató de un récord para la organización en términos de bonos para un jugador amateur.

“El tipo de rutinas que podrá hacer aquí en Estados Unidos será bueno para él”, dijo el gerente general de los Yankees, Brian Cashman. “Entre su ética de trabajo y sus habilidades atléticas, nada de eso se puede negar. Lo único que no tuvo (en el 2020) fue la posibilidad para competir. Esto le brinda otra plataforma para competir”.

“¿Es prematuro presentar a alguien de esa manera en el Juego de Futuras Estrellas? La respuesta es sí. Al mismo tiempo, no podemos negar que es una experiencia de la cual va a aprender. Mala o buena, es una oportunidad para crecer. Nosotros simplemente decidimos tomar ventaja de eso si lo seleccionaban”.

“Yo creo que, a la misma vez, hay mucha emoción y misterio alrededor suyo”, dijo Kevin Reese, director del sistema de fincas de los Yankees. “Debido a la temporada que no se jugó por el COVID, mucha gente no lo ha visto. Vamos a intentar bajar un poco las expectativas, porque lo están comparando con jugadores muy, muy bueno”.

Si bien Reese y los Yankees están tratando de mantener a raya las expectativas – Domínguez tiene 18 años, después de todo, y su primer viaje al plato como profesional lo hizo este lunes – es difícil no emocionarse. ¿Y la posibilidad de verlo en un estadio de Grandes Ligas, en una transmisión de televisión nacional, con los mejores prospectos del juego? Demasiado bueno como para ser verdad.

“Es muy maduro”, dijo Reese. “Está trabajando muy duro en su inglés. Y no es sólo su velocidad o la fuerza de sus batazos, hace cosas que son diferentes. Eso hizo fácil que dijéramos que sí. Si eso es lo que la gente quiere ver, aquí estamos en la industria del entretenimiento, no queremos alejarlo de eso. Pienso que será una buena experiencia, poder estar junto a jugadores realmente buenos”.

“No creemos que eso se le vaya a subir a la cabeza”, apuntó Reese. “Confiamos en su madurez y la confianza que tiene. Incluso si no monta un show, todo estará bien”.

Si bien su currículum profesional es entendiblemente delgado, Domínguez ha estado haciendo cosas fuera del centro de atención que han hecho que los Yankees se sientan muy confiados con respecto a la posibilidad de que la inversión rinda frutos. Reese contó una historia sobre un jonrón de la joven promesa que salió del bate a 114 mph durante una práctica en el complejo de Tampa. En términos sencillos: “Puede hacer cosas que la mayoría de los muchachos de 18 años no pueden hacer”.

“Su madurez, el estar abierto a la información y tratar de adaptarse, ajustarse y aclimatarse son cosas que destacan”, contó Cashman. “Hay muchachos prospectos, bien sea tomados bien arriba en el draft o que reciben grandes bonos, que vienen con la mentalidad de ‘yo no necesito ayuda’”.

“Él realmente está abierto a todo lo que tenemos y ha incorporado algunas cosas porque está hambriento de ir subiendo de nivel, así que no le huye a ninguna oportunidad de mejorar. Esa disposición de confiar y ajustarse al proceso es nueva para él. Eso nos hace sentir muy bien. Si combinamos eso con su ética de trabajo y su talento natural, le da una mejor oportunidad de alcanzar el tope de su potencial”.