¿Cómo será la producción de Juan Soto? Aquí, algunas proyecciones

El dominicano Juan Soto va rumbo a obtener uno de los contratos más grandes en la historia del béisbol, posiblemente acercándose a los US$700 millones garantizados que Shohei Ohtani recibió de los Dodgers el año pasado.

Ohtani, como recordarán, es tanto lanzador como bateador. Soto, por su parte, sólo batea. Pero cañoneros tan jóvenes y talentosos como él rara vez, si es que alguna vez, ingresan al mercado libre. De hecho, hay muy pocos bateadores con un historial estadístico similar al de Soto antes de los 26 años.

Aquí, algunos de los números ofensivos clave de Soto durante sus siete años de carrera, que incluyen cuatro convocatorias al Juego de Estrellas, cinco Bates de Plata, un campeonato de Serie Mundial, un título de bateo y cuatro veces entre los primeros seis en la votación a JMV de su liga:

936 juegos
4,088 veces al bate
Línea de promedios de .285/.421/.532
160 de OPS+
201 HR
769 BB

Tener tanta experiencia en Grandes Ligas antes de los 25 años es una rareza. Sólo 16 jugadores han acumulado al menos 4,000 veces al bate a esa edad. Y cuando se toma en cuenta su desempeño, la lista de comparaciones se reduce incluso más.

Sólo nueve peloteros han alcanzado los 200 jonrones antes de los 25 años. De ellos, cinco lo lograron con un OPS+ de 160 o más: Soto, Mickey Mantle, Mike Trout, el también dominicano Albert Pujols y Jimmie Foxx. ¿El número de jugadores con al menos 200 cuadrangulares y 700 boletos antes de los 25 años? Sólo uno: Soto.

En otras palabras, es difícil encontrar comparaciones directas para un bateador de esta edad y calibre. Sin embargo, si bajamos un poco los criterios, podemos encontrar pistas que podrían ayudar a proyectar cómo evolucionará el bate de Soto, aunque con la obvia salvedad de que no hay dos jugadores iguales.

EL GRUPO DE JUGADORES

Se buscaron jugadores con un perfil estadístico similar al de Soto que también hayan tenido éxito a una edad temprana, dándole prioridad al poder (HR), la paciencia (BB) y el rendimiento general (OPS+). Mira, no es una ciencia exacta, ni pretende serlo. El objetivo es buscar en el pasado un contexto aproximado sobre lo que podría depararle el futuro al quisqueyano.

Para ello, se utilizó Stathead de Baseball-Reference para generar una lista de bateadores retirados, desde la integración en 1947, que hayan alcanzado los siguientes parámetros antes de cumplir 25 años:

100 HR
200 BB
140 de OPS+

Con estos criterios, surgieron 18 posibles comparaciones, y la calidad de los jugadores en esta lista confirma que el enfoque es acertado.

De esos 18, nueve están en el Salón de la Fama: Mickey Mantle, Willie Mays, Hank Aaron, Frank Robinson, Ken Griffey Jr., Frank Thomas, Reggie Jackson, Eddie Mathews y el puertorriqueño Orlando “Peruchín” Cepeda. Otros dos, Pujols y el venezolano Miguel Cabrera, probablemente serán exaltados en su primer intento cuando sean elegibles. Además, Dick Allen tiene posibilidades de entrar con la boleta de la Era Clásica este año. Tres más serían indiscutibles para el Salón de la Fama de no ser por su vínculo con sustancias prohibidas: Alex Rodríguez, Mark McGwire y el dominicano Manny Ramírez. El grupo lo completan Prince Fielder, Darryl Strawberry y Rocky Colavito.

Todos estos 18 jugadores continuaron rindiendo a un alto nivel hasta los 29 años. Todos, salvo uno, tuvieron un OPS+ de 143 o más entre los años 26 y 29, y la única excepción igual registró un OPS+ de 130. Según los valores promedios, este fue el desempeño por temporada de ese grupo: 664 VB, 37 jonrones, OPS+ de 155, y WAR de 6.6.

Como era de esperarse, hubo cierto nivel de declive a medida que estos jugadores pasaron los 30 años. Sin embargo, en general, su desempeño siguió siendo sólido entre los 30 y 33. Su media por temporada en ese periodo fue: 620 VB, 29 jonrones, OPS+ de 153 y 5.1 de WAR.

Entre los 33 y 35 años es donde se empieza a notar una caída más pronunciada, no sólo en el rendimiento, sino también en la disponibilidad. Sólo siete de estos 18 jugadores promediaron al menos 550 veces al bate por campaña en ese tramo. Cinco promediaron menos de 400, y uno no jugó después de su temporada de 32 años debido a lesión. En promedio, el grupo registró: 507 VB, 25 HR, OPS+ de 131 y 3.1 WAR por temporada en ese lapso.

Por supuesto, hay muchas variantes entre los jugadores de este grupo. A continuación, se dividen los 18 nombres en cuatro categorías generales, según su desempeño entre los 26 y 35 años. Se espera que el nuevo contrato de Soto dure más de 10 campañas, pero el análisis se centra en ese periodo. Si los próximos 10 años de Soto se asemejan a sus primeros siete, cualquier valor que aporte después de los 35 será un bono adicional.

EL ESCENARIO SOÑADO

Willie Mays (360 HR, OPS+ de 166 entre los 26-35 años), Hank Aaron (375 HR, OPS+ de 162), Frank Robinson (301 HR, OPS+ de 163), Manny Ramírez (381 HR, OPS+ de 160)

Los nombres en este grupo hablan por sí solos, con Mays y Aaron indiscutiblemente mereciendo mención en cualquier conversación sobre los cinco mejores jugadores en la historia de MLB, gracias a su increíble combinación de talento, consistencia y longevidad.

Como contemporáneo de Mays y Aaron, Robinson tiende a pasar desapercibido entre las leyendas del deporte, pero tuvo una carrera notable por mérito propio. Este cañonero derecho fue el primer jugador en ganar un premio JMV en ambas ligas, con el segundo de ellos tras conquistar la Triple Corona de la Liga Americana en su temporada de 30 años en 1966. Ese fue uno de cinco ocasiones en las que terminó entre los primeros cinco en las votaciones del JMV, que Robinson logró durante el periodo analizado, alcanzándolo a los 26, 29, 30, 33 y 35 años.

Mientras Mays, Aaron y Robinson ingresaron al Salón de la Fama en su primer intento, Cooperstown hasta ahora ha eludido a Ramírez debido a dos pruebas positivas por sustancias prohibidas al final de su carrera. Estadísticamente, se ubica entre los mejores bateadores de todos los tiempos. El dominicano empalmó al menos 33 cuadrangulares, impulsó 102 carreras o más y dejó un OPS de .976 en cada temporada entre los 26 y 34 años.

EL ESCENARIO MUY BUENO

Mickey Mantle (311 HR, OPS+ de 173 entre los 26-35 años), Mark McGwire (405 HR, OPS+ de 173), Miguel Cabrera (290 HR, OPS+ de 158), Frank Thomas (314 HR, OPS+ de 156), Albert Pujols (359 HR, OPS+ de 155), Reggie Jackson (293 HR, OPS+ de 151), Alex Rodríguez (388 HR, OPS+ de 147)

En términos de estadísticas promedio, Mantle siguió siendo uno de los bateadores más productivos del juego a medida que avanzaba en edad, registrando un OPS+ de 165 en sus últimas siete temporadas. Sin embargo, las lesiones limitaron su tiempo de juego una vez que llegó a los 30, promediando sólo 118 encuentros con 24 jonrones entre los 30 y 35 años, y se retiró después de su temporada de 36 años.

Cabrera, Pujols y Rodríguez siguieron trayectorias similares, acumulando temporadas sobresalientes a finales de sus 20 años y principios de sus 30 antes de comenzar a declinar. Entre los 26 y 32 años, estos tres jugadores promediaron 39 jonrones con un OPS+ de 163 por temporada, en comparación con 26 jonrones y un OPS+ de 116 entre los 33 y 35 años.

A Thomas parecía sucederle lo mismo, jugando sólo 20 juegos en su temporada de 33 años y logrando empalmar apenas 28 jonrones con un OPS+ de 119 el año siguiente, muy lejos de su promedio de 34 cuadrangulares con un OPS+ de 164 entre los 26 y 32 años. Sin embargo, Thomas se recuperó a los 35, registrando 42 bambinazos, 105 impulsadas y un OPS+ de 146 en 153 juegos.

A pesar de su figura imponente, Jackson no alcanzó las alturas de los otros cuatro en este grupo entre los 26 y 32 años, promediando 30 jonrones con un OPS+ de 151, pero tampoco experimentó un fuerte declive en sus 30 años. De hecho, registró un OPS+ idéntico de 151 entre los 33 y 35 años, promediando 28 vuelacerca por temporada en ese periodo.

McGwire es un caso único, ya que en realidad tuvo sus mejores temporadas después de cumplir 30 años. Este poderoso bateador promedió 61 jonrones por año con un OPS+ de 189 entre los 32 y 35 años, incluyendo el entonces récord de 70 jonrones en 1998. A pesar de ello, McGwire también registró un OPS+ estelar de 154 entre los 26 y 31 años, aunque promedió sólo 27 cañonazos en ese tiempo debido a lesiones que lo limitaron entre 1993 y 1995.

ESCENARIO MIXTO

Dick Allen (257 HR, OPS+ de 157 entre los 26-35 años), Ken Griffey Jr. (347 HR, OPS+ de 142), Eddie Mathews (287 HR, OPS+ de 137)

Aunque su OPS+ vitalicio de 156 lo coloca al nivel de muchas de las grandes figuras mencionadas, Allen no ha logrado entrar al Salón de la Fama debido a un déficit en las estadísticas acumuladas, con 1,848 hits y 351 jonrones totales. Entre los 26 y 30 años, Allen promedió 32 jonrones y 97 impulsadas por temporada con un OPS+ de 164, un tramo que concluyó con una temporada de JMV en la Liga Nacional en 1972. Sin embargo, jugó solo 458 partidos y conectó 80 jonrones en el resto de su carrera, lidiando con lesiones frecuentes.

Griffey, miembro del Salón de la Fama en su primer intento, terminó con 630 jonrones, pero sigue siendo uno de los mayores "qué hubiera pasado si…" del béisbol, ya que las lesiones limitaron una carrera que podría haber sido aún más prolífica aun. Griffey logró 40 o más jonrones en cada temporada entre los 26 y 30 años, pero acumuló solo 98 en 445 encuentros entre los 32 y 35 años.

De manera similar, Mathews tuvo sus mejores años antes de cumplir 30, con una marcada caída en su producción ofensiva entre los 32 y 35 años (OPS+ de 115).

EL ESCENARIO DECEPCIONANTE

Darryl Strawberry (161 HR, OPS+ de 131 entre los 26-35 años), Prince Fielder (129 HR, OPS+ de 131), Orlando Cepeda (187 HR, OPS+ de 129), Rocky Colavito (245 HR, OPS+ de 127)

Es difícil comparar a Soto con Strawberry, cuya carrera se descarriló debido a problemas con el abuso de sustancias. Strawberry disputó solo 335 partidos después de cumplir 30 años. Lo mismo aplica para Fielder, quien se retiró tras su temporada de 32 años debido a una lesión en el cuello.

Cepeda jugó hasta los 37 años, pero los problemas de rodilla que lo aquejaron durante gran parte de su carrera cobraron factura en sus últimos años. El puertorriqueño vio su producción caer significativamente tras su temporada de JMV en la Liga Nacional a los 29 años, promediando apenas 18 cuadrangulares por temporada con un OPS+ de 118 entre los 30 y 35 años.

Cepeda fue exaltado al Salón de la Fama por el Comité de Veteranos en 1999, aunque gran parte de su candidatura dependió de lo que logró en sus 20 años.

Colavito tuvo temporadas espectaculares al principio de su carrera, promediando 35 jonrones por campaña con un OPS+ de 138 entre los 24 y 31 años, incluyendo tres temporadas de 40 jonrones. Sin embargo, el declive llegó rápidamente para el jardinero, quien solo jugó dos años más después de su última temporada como todoestrella a los 32 años, registrando un OPS+ de 101 en ese periodo.