Bogaerts y Devers, dúo de lujo en Boston

Se suponía que el mejor lado izquierdo de un infield estaría en el oeste, con Manny Machado y el dominicano Fernando Tatis Jr., quien ha estado a la altura de las expectativas, con 14 jonrones y un OPS de 1.077, mientras que el primero ha sufrido problemas en el hombro, lo cual explica por qué está bateando apenas .228 hasta ahora, con seis bambinazos.

Es por eso que la élite de esas dos posiciones, pasado un tercio de temporada, se ha trasladado al otro lado del país en el Fenway Park, en donde están Xander Bogaerts y el dominicano Rafael Devers, que discretamente están en medio de su quinta temporada juntos.

Hay razones por las cuales los Medias Rojas, de quienes no se esperaba mucho este año, se encuentran en el cuarto lugar en carreras producidas en las Mayores y son el mejor equipo con OPS de .767.

Claro, J.D. Martínez está de regreso como la figura de poder en el medio del orden ofensivo de Boston. Pero son Bogaerts y Devers las figuras a seguir en unos Medias Rojas que llegaron al sábado con récord de 31-20.

En Grandes Ligas, no hay un campocorto mejor o más valioso que Bogaerts, que ha continuado siendo una presencia desde que subió como antesalista a los 20 años, cuando los Medias Rojas estaban camino a ganar la Serie Mundial del 2013. Bogaerts se cuentra en el segundo lugar en la Liga Americana en hits y cuenta con un promedio de .333.

Y luego está Devers. Lo que no te aporta con el guante – tiene siete errores defensivos este año, pero Nolan Arenado también -- el dominicano lo compensa en el plato. Lidera las Mayores con 43 carreras impulsadas. Entonces, los Medias Rojas tienen la mayor cantidad de hits con su paracorto y su antesalista es el líder de impulsadas. La mejor parte es que Bogaerts no cumplirá 29 años hasta octubre, mientras que Devers cumplirá 25 ese mismo mes.

El quisqueyano tenía 20 años cuando llegó a Boston durante la temporada del 2017. La misma edad que tenía Bogaerts cuando debutó en el 2013. Los dos han estado juntos desde entonces. Nunca había habido tanto talento en ese lado del cuadro en la historia de los Medias Rojas. Uno es bateador derecho. El otro es zurdo. Ambos son máquinas de dar líneas.

El jueves, le pregunté al gran Dennis Eckersley cuán talentoso piensa que es Devers.

Su respuesta fue: “Un fuera de serie”.

Es así de talentoso, con ese poder y velocidad con su bate. Todo el mundo recuerda aquella noche de domingo en agosto del 2017, poco tiempo después de haber llegado a las Mayores. Era la novena entrada en el Yankee Stadium y el equipo de casa estaba buscando sellar la victoria 2-1 sobre Boston. El cubano Aroldis Chapman estaba en la loma, tirando 100 mph como siempre. A ese punto de la temporada, el cubano sólo había permitido un cuadrangular en todo el año ante un bateador zurdo.

Chapman lanzó una recta que el chico conectó a 102.8 mph. Devers se la sacó en dirección hacia el jardín izquierdo-central. Sigue siendo el lanzamiento más rápido que haya terminado en jonrón en la era en la que medimos ese tipo de cosas. Más que nada, fue Devers anunciando su llegada. Sigue aquí; a la derecha de Bogaerts.

El miércoles pasado, Devers conectó su 14to cuadrangular del año en la victoria 9-5 sobre los Bravos. Bogaerts anotó tres carreras más. Ha sido así todo el año para Boston. Nuevamente, Martínez ha retomado su forma tras un complicado 2020 y el mexicano Alex Verdugo – quien llegó al equipo en el cambio de Mookie Betts – está bateando .293 con siete jonrones, 23 impulsadas y 51 imparables.

Verdugo es segundo bate y Martínez el tercero. Luego viene la dupla de Devers y Bogaerts. Es difícil de creer que hayan estado juntos por tanto tiempo. Pero los aficionados de los Medias Rojas esperan que siga prolongándose.

Esto fue lo que Bogaerts dijo sobre Devers tras la gran jornada del dominicano ante los Bravos.

“Cuando está enfocado, es bien peligroso. Es divertido de presenciar. Es capaz de echarse el equipo al hombro durante semanas o meses. No es el tipo de muchacho que sólo rinde por par de días”.

Hay muchas razones que explican por qué el equipo del puertorriqueño Alex Cora está donde está. Comienza con la parte izquierda del cuadro.