Las leyendas se reconocen entre ellos mismos

A pesar de ser protagonistas de una de las rivalidades más intensas a lo largo de todas las ligas profesionales en este planeta, los Dodgers y Gigantes demostraron el domingo por la tarde que sí existe un gran nivel de respeto.

Si bien que Oracle Park rindió homenaje a la prestigiosa carrera de su manager, Bruce Bochy, quien le brindó a la organización de San Francisco tres campeonatos en cinco temporadas, hubo otro miembro del equipo que fue tan importante en la conquista de eso tres anillos, Madison Bumgarner.

A pesar de que corrieron rumores de que el as de los Gigantes tal vez iba a ser canjeado de cara a la fecha límite de cambios del 31 de julio, Bumgarner permaneció en la Bahía junto al único dirigente para quien ha jugado a lo largo de sus 11 campañas en las Grandes Ligas.

Aunque el MVP de la Serie Mundial de 2014 no lanzó en el último juego dirigido por Bochy, Bumgarner, quien será agente libre tal vez accionó por última vez con el uniforme de los Gigantes cuando el manager lo envió a la caja de bateo como bateador emergente.

El momento quizás no pudo ser más adecuado y perfecto en el quinto inning, a 60 pies del plato lo esperaba Clayton Kershaw, el as de la escuadra angelina, que tuvo un sinnúmero de duelos con Bumgarner.

Si bien que Kershaw retiró al “MadBum” por vía de una línea a la antesala para concluir la entrada, el lanzador de los Dodgers se retiraba de la lomita y en un acto de caballerismo y señal de respeto, se quitó la gorra en dirección de uno de sus competidores y Bochy.

No podemos esperar hasta el 2020 para ver la continuación de los duelos entre Kershaw y Bumgarner, dos futuros miembros del Salón de la Fama.