Las celebraciones de los "walk-offs" tienen sus límites, según la esposa de José Altuve

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Las celebraciones que se desatan en el terreno de juego, especialmente luego de un ‘walk-off’, tienen un cierto límite, según la esposa de José Altuve.

Cubetazos de hielo. Cubetazos de Gatorade. Latas rellenas de chicles. Semillas de girasol. Hasta arepas. Todos estos manjares valen a la hora que decidan bañar al héroe de los Astros de Houston.

Cuando el MVP de la Serie de Campeonato de la Liga Americana se acercaba a pocos pies de plato de Minute Maid Park tras conectar el jonrón que envió a los Astros a la Serie Mundial, las cámaras de la cadena deportiva FS1 captaban al sonriente venezolano asegurándose de su camiseta.

Se puede apreciar cómo le gritaba a sus compañeros, “¡La camisa no!”

Resulta que la esposa de Altuve no es muy fan de que le arrebaten por completo la camiseta al seis veces Todo Estrella.

“La última vez que lo hicieron”, relataba Altuve a FS1, “me metí en problemas con mi esposa”.

Será interesante saber si los compañeros respetarán aquellos deseos de la Señora Altuve en el momento que su esposo conecte el palo que le brinde a los Astros el segundo campeonato de Grandes Ligas en tres años.

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