Bryce Harper se desquitó de los abucheos en su regreso a D.C.

Los regresos a antiguos parques siempre son un espectáculo. Bryce Harper regresando a Nationals Park como miembro de los Phillies fue más que un juego, fue un evento casi de película.

Primero vimos los abucheos, una tradición usual de una fanaticada cuando un jugador estrella se va de su equipo. Después, dos turnos contra Max Scherzer; poder contra poder, que resultó en dos ponches. Y finalmente, luego de varios hits, Harper puso a los fanáticos en modo de silencio con un bombazo de jonrón.

Por supuesto, Harper decoró su jonrón con un legendario “bat flip”.

A pesar de los abucheos, Harper también tuvo una multitud de fanáticos de los Phillies que estuvieron presentes en D.C. y éste los reconoció.

Con tanto drama, es fácil olvidar que los Phillies rieron últimos con una victoria de 8-2.